Que Bankia se rescate a sí misma

Publicado el 08 mayo 2012 por Vigilis @vigilis
Con tantos dimes y diretes, al final, no me enteré de lo que ha pasado con Bankia. Que si va a haber una inyección de dinero público para rescatarla sin que sea un rescate. Que si el PSOE aprovecha el tema para criticar al gobierno cuando ellos inauguraron la temporada otoño-invierno de rescates bancarios con dinero público. Que si los sindicatos se ponen a gimotear cuando ellos han tenido (no sé si todavía tienen) a estómagos agradecidos en los consejos de administración de esas cajas públicas que actuaron por el Bien Común y que han propiciado el mayor desastre financiero desde Maricastaña. Que si Rato, coge y hace las maletas con nocturnidad y alevosía cuando esa decisión en una situación normal se toma con antelación y el acuerdo del consejo de administración.
Y a todo esto, la comparación con el famoso rescate americano tras la explosión termonuclear de Lehman Brothers.

El FROB rescatando a Bankia.

De lo importante, más allá de las conversaciones entretenidas de la pelu, no tengo conocimiento: si se da dinero público para el no-rescate de Bankia, ¿en qué condiciones se hará? Tampoco sé nada -sigo siendo sincero- de qué medidas previas ha tomado Bankia para pedir al gobierno el mínimo dinero posible. Es decir, si tiene un montón de pisitos de los que le gustan a aquella individua de las kelly-finder, por qué no se deshace de ellos con rebajas del 80%. Es más, ni siquiera me meto con las participaciones de Bankia en Metrovacesa y Realia. Que, entiendo, de forma indirecta hace a Bankia soportar unas deudas bastante guapas. Es más, siendo malvado, no estaría mal que la Koplowitz también pusiera a la venta unos cuantos miles de pisitos con rebajas del 80%.
Si se trata de sanear las cuentas, reducir tu deuda y capitalizarte, te tienes que deshacer de la grasa. Usar el comodín del FROB es un abuso. Ni a Mariscos Pepe ni a la señora de la esquina de 90 años que arregla pantalones les va a llover del cielo un dinero público regalado. Esas empresas se tienen que apretar el cinturón cuando las cosas vienen mal dadas. No estaría mal que nuestras grandes empresas aprendieran economía de nuestras pymes.
Vale, lo sé: no es comparable el caso de Mariscos Pepe al de Bankia. Si Bankia explota, estaremos recogiendo sesos de las paredes hasta el siglo 28. Pero hombre, que ellos mismos a nivel interno adelgacen, no estaría mal y no lo hacen.
Entonces me pregunto ¿qué motivos tienen para no corregirse a sí mismos más allá de la existencia del FROB como comodín del público? Yo diría que su mayor incentivo para actuar como un adolescente borracho al volante está en las recientes declaraciones de Rajoy. Mi paisano en el programa de Carlos Herrera vino a decir algo así como: «estoy dispuesto a hacer cosas que no me gustan e incluso cosas que dije que no haría». Esta gran declaración me lleva a preguntarme si Rajoy es un gran estadista o simplemente un chiflado. Ante las reacciones del público -chascarrillos, coñitas y demás; en lugar de exigir inmediatamente la convocatoria de elecciones-, puedo pensar que está más cerca del chiflado. Un loco al timón de una nave llena de locos.
Si esta es la misma lectura que hace Bankia -que vivimos en un país de locos serviles-, entonces podrán hacer lo que les de la gana. Es más, no me extrañaría que mañana subieran el precio de sus pisos. Vale todo, el dinero es infinito y el surtidor del dinero -los currantes y rentistas- no tiene ningún tapón.

O le duelen los dientes o se huele los dedos.

En la sesión del Senado (el Senado sí sirve para algo: para ver a Rajoy), se evidenció esta situación terminal de nuestra clase política:
PSOE dice: hemos hecho rescates a la banca con dinero público pero no nos gusta que vosotros los hagáis.
PP dice: si no hubierais mentido, no necesitaríamos hacer este plan de ajuste en el que se incluye el no-rescate a Bankia.
PSOE dice: vosotros sabíais cuál era la situación porque nos apoyasteis en nuestros planes y gobernabais varias regiones.
PP dice: prometimos no subir los impuestos pero antes prometimos reducir el deficit.
Con todo este percal, nadie con algo de responsabilidad pública dice «oiga, igual los bancos tienen que limpiar sus balances ellos solos y si alguno quiebra, que quiebre». Supongo que se debe al miedo de ir "contra la razón de Estado". El caso es que tratándose de España, la "razón de Estado" es cualquier cosa.