El elemento de seguridad más importante del que disponemos cuando practicamos bicicleta de montaña es el casco. En este caso equivaldría al cinturón de seguridad del coche, y es recomendable llevarlo puesto siempre, ya que por mi despacio que vayamos o pequeña que sea la caída podemos darnos en la cabeza y las consecuencias del golpe pueden ser muy graves.
Los cascos que se utilizan en el ciclismo de montaña están fabricados principalmente con poliestireno expandido, que es un material muy ligero y que resiste impactos de una intensidad media.
Precio del casco
Lo primero que nos llama la atención cuando vamos a una tienda y queremos comprarnos un casco es la diferencia de precios que hay entre unos y otros. Podemos encontrar cascos que cuestan 20 euros y cascos que cuestan 200 euros. El precio está relacionado con diferentes aspectos que presenta el casco. El primero de ellos es la calidad del poliestireno expandido. Generalmente los cascos más caros suelen presentar un poliestireno de mayor calidad.
En el precio también influye la ventilación. De hecho, los cascos de gama más alta son probados en el túnel de viento para analizar como canalizan el aire y así poder ganar en aerodinámica.
Y evidentemente en el precio también incluye el diseño del casco. Evidentemente no es necesario gastarse 200 euros en un casco si eso nos parece una barbaridad. Pero tampoco es muy recomendable gastarse lo mínimo posible, ya que nos podemos arrepentir en el caso de que tengamos una caída.
Homologación
Un aspecto también muy importante a la hora de adquirir un casco, es que éste tenga la correspondiente homologación. Por ello, en Europa debemos elegir uno que contenga las siglas CE, lo cual nos va a asegurar que cumple con la normativa mínima de seguridad que exige la unión europea.
Talla
La talla también es un aspecto importante a la hora de elegir un casco. Si compramos un casco que nos queda demasiado grande, no nos ajustará correctamente a la cabeza y en caso de caída no nos protegerá todo lo suficiente. Las tallas de los cascos vienen expresadas en cm, que son el diamétro de la cabeza. Es importante probarse el casco antes de adquirirlo para asegurarnos de que nos queda perfecto.
Fijación
El sistema de fijación del casco es importante que toque cómodamente, sin hacernos daño, todo el contorno de nuestra cabeza, así como la parte superior. En esa posición tendremos que comprobar que el casco quede totalmente nivelado en nuestra cabeza, y cuando tengamos cerradas las correas nos quede estable y sujeto.
Mantenimiento
En cuanto al mantenimiento del casco, tenemos que tener en cuenta varios factores. El primero de ellos es el volumen de nuestra cabeza. No es que nuestra cabeza cambie de tamaño, pero no es lo mismo tener el pelo muy corto que largo, o si en invierno nos ponemos un gorro o un buff. En esas condiciones cambiará el volumen de nuestra cabeza, por lo que tendremos que reajustar el casco para que quede en una posición correcta.
Para limpiarlo lo más recomendable es utilizar jabón y agua, y no utilizar en ningún caso ningún tipo de disolvente o producto de limpieza.
Vida útil
Por último, algo que muchas veces no se tiene en cuenta con los cascos es que éstos caducan. Depende de los fabricantes, pero los cascos suelen tener una vida últil de entre 2 y 5 años. Pasado ese tiempo puede perder propiedades y no proteger todo los suficiente.
También tendremos que cambiarlo a la primera caída que tengamos. Aunque parezca externamente que el casco está en perfectas condiciones, debido a una caída por dentro puede tener fisuras. En estos casos es mejor prevenir que curar.
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