¿Qué debemos saber de los niños antes de tenerlos?

Por Viviendo Con Peques @ViviendoCpeques

Tener hijos nunca es como nos han contado, ¿por qué?, pues porque cada niño es diferente, incluso entre hermanos podemos encontrar dos personas totalmente distintas. Lo que sirve para uno no sirve para otro, por ello hay que tener en cuenta que cada bebé es un ser individual, no hay otro como él, y por ello nuestro “trabajo” como padres es conocerlo, mimarlo, quererlo, y adaptarnos a lo que creamos que es mejor para él.

Nadie nos enseña a ser padres, y os aseguro que por mucha experiencia que se tenga en el trabajo con niños no sirve para nada pues tu hijo no tiene nada que ver con los hijos de los demás. Siempre digo que es muy fácil educar correctamente a los hijos de los demás, pero es muy dificil hacerlo con el tuyo propio. Yo quiero mucho a mis alumnos, pero la implicación emocional que tengo con mi hijo es mucho superior, es diferente, y eso nos hace actuar de un modo totalmente distinto. Eso me hace poder curar con total serenidad una herida de un peque de mi clase y ponerme como un flan cuando mi hijo se hace un simple “chichón”.

Me gustaría haceros llegar una serie de consejos que pueden serviros a la hora de convertiros en padres:

  1. No hagáis ni …. caso a nadie. Puede sonar un poco brusco pero es así, podemos escuchar consejos pero no guiarnos por ellos, pues si lo hacemos podemos volvernos locos. Cada uno nos hará su propia aportación (no lo cojas – cógelo, déjalo llorar – ni se te ocurra dejarlo llorar…) y además lo harán desde su punto de vista propio, según sea su hijo, o según sea su idea de ser padres en caso de gente que todavía no lo son. Conclusión, el padre o madre de tu hijo eres sólo tu, el responsable de su educación, la persona que va a estar toda la vida a su lado apoyándole cuando tropiece, enseñándole lo que es el mundo, y luchando cada minuto de tu vida porque sea feliz. Por ello tu eres la única persona que decidirá cómo actuar con tu hijo, y lo harás pensando siempre en lo que es mejor para él, pues el hijo del vecino, tu primo, o tu sobrino no tienen las mismas necesidades que pueda tener el tuyo.
  2. Lee mucho. Hoy en día hay muchos tipos de disciplinas, de estilos de crianza, diferentes modos de hacer las cosas. Infórmate, busca, no te quedes con lo que te han contado pues hay muchos modos distintos de educar, de actuar, hay muchas actividades que quizá no conozcas que pueden ser muy beneficiosas para tu hijo, hay un mundo de información a tu alrededor. Búscala, valórala, y luego coge lo que te interese y lo que creas adecuado para educar a tu hijo, para trabajar con tu familia.
  3. Puedo recomendaros varios libros que creo interesantes para leer, desde luego lo hago desde mi punto de vista y mi experiencia, para mí son buenos, pero para vosotros pueden no serlo, en mi caso me han gustado mucho:
    • El cerebro del niño, de Daniel J. Siegel (lo estoy leyendo ahora y me está aportando una visión diferente de los niños de la que tenía hasta ahora; para empezar algo tan simple como darte cuenta de que su cerebro no está formado todavía y no lo hará hasta dentro de muchos años, por ello hay veces que pedimos cosas a los peques que son totalmente imposibles para ellos por mucho que nos empeñemos en lo contrario)
    • Educar con sentido común, de Javier Urra
    • Cualquiera de los tres libros de Ana Isabel Fraga, Susurradora de Bebés
    • Cómo educar con firmeza y cariño, de Jane Nelsen
    • Como revista “Crecer Feliz”
  1. Infórmate de las etapas evolutivas de los niños, esto te hará entender ciertos comportamientos, y saber cuales son los que pueden realizar a su edad. Teniendo en cuenta que cada uno tiene su propio desarrollo, si por ejemplo comienza una etapa de despertares nocturnos “sin sentido” alrededor de los 2-3 años y te has informado de ello, podrás saber que es algo normal a esta edad, y desde ahí podrás actuar para ayudar a tu hijo del modo correcto.
  1. Para los cólicos del lactante: sin duda alguna el Método Rubio, para nosotros fue una especie de “milagro”, y prometo hablaros pronto más a fondo sobre él
  1. Antes de que los peques comiencen la escuela infantil o el cole, o si son de los que cogen todo: homeopatía, a nosotros en casa nos ha ido de maravilla. Nos lleva Raquel Fraga, y hace consulta online, yo os la recomiendo totalmente.
  1. Los bebes perfectos (esos que duermen de tirón, comen bien, no lloran, nunca se ponen malos…) no existen, os cuenten lo que os cuenten no existen. Es cierto que durante una temporada pueden estar en modo “angelito” pero por un modo u otro siempre cambian, pero ¿a que nosotros tampoco lo somos? Si fueramos perfectos seríamos un rollo
  1. Los bebes lloran, y tienen que hacerlo porque es su modo de expresión, su único modo de expresarse, no lo hacen por joder (con perdón), si un bebé llora es importante ver que le pasa, poco a poco podremos saber si llora por hambre, sueño, porque le duele algo, o simplemente porque tiene mimitos, pero hay que tener en cuenta que un bebé de 2 meses no piensa “voy a llorar un rato para fastidiar a mis padres, que se despierten ya que son las 5 de la mañana”. Conforme son más mayores intentan utilizar el llanto para conseguir cosas a veces, pero llegado ese momento ya conocemos a nuestros hijos de sobras y sabremos cuando lloran por un motivo u otro, y cuando el llanto puede ser mayor o menor motivo de preocupación.
  1. No pasa nada por cogerlos, ¿a qué no habéis visto a ningún padre llevando en brazos a su hijo de 15 años?, yo tuve muchas peleas por eso; sobretodo la gente mayor me decía que ni se me ocurriera cogerlo, y yo no hacía ni caso, lo cogía y lo achuchaba todo lo que podía. Tuve un embarazo muy malo, tuvimos miedo de que las cosas pudieran salir muy mal muchas veces a lo largo del embarazo por diversos motivos, y una vez fuera no quería desaprovechar ni un segundo al lado de peque. Dormía en su cunita, pero cuando estaba despierto lo cogía mucho en brazos y lo llenaba de mimitos. Ahora en cambio no aguanta ni un segundo dando un abrazo, y no será porque no lo intente. Dar mimos, abrazos y cariño a nuestros hijos no es malo, ¿o acaso no nos gusta que a nosotros nos den besos, abrazos, muestras de cariño? Pues imaginaros unas cositas indefensas recién llegadas al mundo, que acaban de pasar de un lugar en el que estaban completamente a salvo, tranquilos, felices, sin tener que cubrir ninguna necesidad por ellos mismos; a un lugar lleno de luces, ruidos, donde se sienten indefensos y donde lo único que les devuelve un poquito a ese ambiente tan cálido son los brazos de su madre, poder escuchar de nuevo su corazón, que ha sido su banda sonora durante 9 meses.

Estos sólo son algunos consejos, os dejo con un par de frases mías que ya os he dicho alguna vez pero que me gustan mucho y un último consejo: disfrutar mucho de vuestros hijos, pues son lo mejor que nos puede pasar en la vida.

“ No es tan importante la cantidad del tiempo que pasamos con nuestros hijos, sino la calidad del mismo”

“Todos los padres son perfectos sólo por esforzarse cada minuto de su vida en serlo”