En la medicina hay algunos datos interesantes del mundo que las personas no conocen. Las diferentes enfermedades y sus formas de prevención forman parte de estos. En esta ocasión hablaremos del ictus empezando por qué es el ictus.
En este artículo podrás saber qué es el ictus, pero no solo esto. Síntomas, tratamiento y señales de alarma entre otros datos curiosos de la enfermedad. Tener en cuenta todos estos datos interesantes es muy importante para la concientización y prevención del ictus isquémico.
Para empezar, uno de los conceptos que de mas importantes que debemos conocer para comprender este artículo es el ictus. Pero antes de entender que es el ictus, es necesario conocer la definición de isquemia.
¿Qué es el ictus y definición de Isquemia?
La definición de isquemia es poco conocida, a diferencia del ACV o derrame cerebral que es la preocupación de muchas personas. Sin embargo al repasar la definición de ictus veras cuán importante es saber de qué trata.
Definición de isquemia
La isquemia es o se define como la disminución o detención del flujo de sangre a través de las arterias. Esto ocurre en una determinada zona del cuerpo y provoca un estado de sufrimiento celular por falta de oxígeno y nutrientes.
Otra manera un poco menos compleja de definir isquemia es: El estrés celular, producido por la falta de oxígeno y nutrientes en una zona determinada del cuerpo.
¿Qué es el ictus?
Se puede definir el ictus como un trastorno en la circulación cerebral que se manifiesta de forma súbita o violenta. El ictus puede ser hemorrágico, así como puede ser isquémico. Una vez conoces la definición de ictus podemos hablar acerca del ictus isquémico.
Ictus isquémico
El ictus isquémico, se puede definir sencillamente como un trastorno de estrés celular, ocasionado por un déficit repentino de nutrientes en el cerebro. Por supuesto, se produce debido a trastornos en la circulación cerebral.
El ictus isquémico o isquemia cerebral es conocido la mayor parte del tiempo como ACV, estas últimas son las siglas de Accidente (o ataque) cerebrovascular.
Otros términos utilizados son infarto cerebral o apoplejía, aunque en ocasiones se confunde con el derrame cerebral, el cual entraría en realidad en la clasificación de ictus hemorrágico.
Ictus hemorrágico
El ictus hemorrágico o derrame cerebral es ocasionado por la delgadez de las paredes vasculares que dan lugar a la rotura de los mismos.
Causas de ictus
Se define ictus como el conjunto de enfermedades relacionadas a las funciones cerebrovasculares. Ictus es cualquiera de estas enfermedades que afecte los vasos sanguíneos en el cerebro.
El ictus se produce por alteraciones en el flujo de los vasos sanguíneos en el cerebro. Si el vaso se rompe y produce un derrame cerebral o si por el contrario el flujo se detiene a causa de un coagulo de sangre.
Las dos formas principales en las que se presenta la isquemia son el ictus hemorrágico o derrame y el ictus isquémico o infarto cerebral. El primero es cuando se da un derrame de sangre y el segundo en el que se detiene el flujo.
Para conocer a detalle las causas del ictus hemorrágico y el ictus isquémico es necesario en primer lugar conocer los subtipos. A continuación las causas de cada tipo y subtipo del ictus cerebral.
Tipos, subtipos de ictus y causas
En resumidas cuentas, los ictus se pueden clasificar en dos tipos principales: ictus isquémicos e ictus hemorrágicos.
Ictus cerebral de tipo Isquémico:
Esta es la patología que se da con más frecuencia en la actualidad. Se produce debido a la obstrucción de un vaso sanguíneo. Se relaciona al cúmulo de colesterol que obstruye las arterias.
Esto genera coágulos de sangre que dan lugar a los siguientes subtipos:
- Ictus trombótico o trombosis cerebral: Es causado por un coágulo de sangre formado en las paredes de importantes arterias, bloqueando el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro.
- Ictus embólico o embolia cerebral: Este déficit de flujo sanguíneo se origina por un coágulo de sangre que se ha formado en el corazón.
- Ictus hemodinámico: Este es el tipo de ictus isquémico menos frecuente.. Se debe a una presión sanguínea muy baja. Problemas graves de presión arterial, un paro cardiaco o una arritmia de gravedad son otras causas de ictus isquémico de este tipo.
Ictus cerebral de tipo hemorrágico o derrame cerebral:
Es ocasionado por la rotura de un vaso sanguíneo debido a un aneurisma congénito cerebral o hipertensión arterial. Este tipo de Ictus es menos frecuente que el tipo de ictus isquémico. Sin embargo las secuelas que produce son de mayor gravedad.
La sangre que se derrama debido a la hemorragia ocasiona otros daños en el área cerebral. Entre las consecuencias se encuentra la compresión que la sangre extravasada ejerce sobre las estructuras cerebrales.
Debido a la diferencia de presión osmótica se genera un hematoma que atrae líquido plasmático, aumentando así el efecto compresivo. Todo esto aumenta el área afectada, por lo que los diagnósticos médicos suelen durar de 24 a 48 horas.
Este tipo de ictus cerebral se puede clasificar en subtipos de isquemia: hemorragia intracerebral y hemorragia subaracnoidea.
- Hemorragia intracerebral: Este ictus es el más frecuente, su causa principal es la ruptura de una arteria cerebral causando la salida descontrolada de la sangre. Esto causa una presión sobre el cerebro y lo daña de una manera grave, teniendo gran peligro en la vida.
- Hemorragia subaracnoidea: Esta hemorragia se produce en unas zonas específicas, por la superficie del cerebro y en la parte profunda del cráneo. La causa de la ruptura y hemorragia es la anormal delgadez de una pared de la arteria afectada. La arteria afectada toma una forma de saco lleno de sangre que por la presión termina rompiéndose, provocando un derrame.
Síntomas de la Isquemia cerebral o ictus
Reconocer los síntomas de ictus es esencial para reconocerlo y acudir rápidamente a urgencias médicas para recibir tratamiento. Entre los síntomas más comunes podemos encontrar las siguientes señales de alarma de ictus cerebral.
- Dificultad en el habla: Lenguaje confuso, distorsión de las palabras, adormecimiento y dificultad para articular.
- Perdida de la vision: Se produce de forma súbita y puede ser en uno de los dos ojos o en ambos. Esta pérdida de visión puede ser total como puede ser parcial, es decir, que no siempre se pierde del todo la vista.
- Dolor de cabeza repentino: Se produce de forma súbita y con una intensidad poco común. Es un dolor de cabeza repentino, sin ninguna causa aparente.
Por último, puede presentar también un aturdimiento general en todo el cuerpo. Los trastornos de equilibrio o sensación de vértigo al igual que la fatiga son también señales de alarma de la isquemia cerebral.