¿Qué es la Ley de Segunda Oportunidad?

Por Abogadozaragoza

La Ley de Segunda Oportunidad (RDL 1/2015, de 27 de febrero, de mecanismo de segunda oportunidad, reducción de carga financiera y otras medidas de orden social.) es una gran desconocida para la mayoría de los ciudadanos.


Mediante este mecanismo, aplicando los principios del concurso de persona jurídica y apoyándose en su ley, permite que las personas que ya no pueden hacerse cargo de sus compromisos financieros, y que no puedan hacerlo en un futuro, tengan una salida a esa situación de insolvencia y que, en un plazo determinado por la ley, lleguen incluso a librarse definitivamente de sus deudas.

Puede llegar a liberarse de todas sus deudas.

Declararse en concurso, aun siendo persona física, no es más que informar de que ha llegado un momento, en el que, por las causas que sean, ya no se es capaz de pagar todas las deudas que se tienen contraídas, se es insolvente y con la declaración se inicia un proceso para intentar vivir dignamente y pagar a los acreedores, en un intento por no acabar en la economía sumergida, pudiendo volver al tráfico jurídico habitual sin la  carga vitalicia de las deudas que ya no se pueden pagar.

¿Qué ha cambiado la Ley de Segunda Oportunidad?

El mayor cambio producido gracias a esta ley es que el concurso ya no es exclusivo de las personas jurídicas, hasta la promulgación de la ley si una persona física o un autónomo entraban en quiebra debían responder de las deudas con su patrimonio presente y futuro, es decir, toda su vida iban a arrastrar esas deudas que no habían podido pagar, cumpliendo con el principio de responsabilidad universal del art. 1911 CC.

Ahora los particulares también pueden optar al concurso igual que las empresas.

La Ley de Segunda Oportunidad permite a particulares y autónomos acogerse a este mecanismo para poder liquidar su patrimonio, si existe, pagar a sus acreedores, e incluso solicitar el perdón de las deudas que queden pendientes.

¿Cómo funciona el concurso de persona física?

Para poder iniciarlo se han de cumplir una serie de requisitos, en mi opinión, el más importante es el de haber actuado de buena fe, que a su vez implica cumplir otras exigencias.

Si cumplimos con todos ellos podremos activar el mecanismo e intentar llegar a un pacto con los acreedores mediante el Acuerdo Extrajudicial de Pagos, si esta fase fracasa entraríamos de lleno en el concurso, tras el cual y, dependiendo de la situación, podremos solicitar la exoneración del pasivo (perdón de deudas).

Es muy importante la buena fe.

Como es obvio lo que acabamos de comentar en el párrafo anterior es una simplificación extrema de lo que supone un concurso de persona física, es un proceso complejo en el que, dependiendo de la fase, intervienen varios profesionales, notario, abogados, procuradores, mediadores, administradores concursales, jueces, etc.

¿Me interesa declararme en concurso mediante la Ley de Segunda Oportunidad?

Cuando menos le interesa saber qué es este mecanismo y cómo funciona, ya que no existe otra alternativa para liberarse de las deudas de manera definitiva y si usted, por la crisis económica, por un cambio radical de su situación económica, por hechos inesperados (enfermedad de un familiar, accidentes, etc.) se ha visto abocado a la insolvencia merece poder empezar de nuevo y no vivir de por vida con unas deudas que jamás va a poder liquidar.

Somos conscientes de que esta Ley genera infinidad de dudas, cómo solicitar la ley de segunda oportunidad?, cómo funciona?, cómo se tramita?, cómo acogerse?, le recomendamos dejarse asesorar por expertos en segunda oportunidad para salir de dudas.