¿Qué es la Permacultura? V. Cuidado de la tierra.

Por Karlosv9

Como explicamos en anteriores capítulos, la permacultura es diseño y observación. Se diseñan espacios pensados para que el hombre logre abastecer sus necesidades de forma sostenible, ecológica y respetuosa con el medio ambiente. La inspiración en la permacultura viene de la naturaleza, de los ecosistemas naturales de los que el hombre aprende la importancia de la interacción y la ayuda mutua. La permacultura se sustenta en tres pilares principales%A0: el cuidado de la tierra, el cuidado de las personas y una justa equidad.
El cuidado de la tierra.

La permacultura incide principalmente en el cuidado de la tierra. El cuidado de la tierra puede verse desde dos ángulos diferentes:

  • El lado medioambiental, los medioambientalistas.
  • El lado ecológico, los ecologistas.

El medioambientalista ve a las personas esencialmente separadas del resto de la naturaleza.

Cuando se trata de medioambiente se habla de lo que rodea a las personas, no de ellas mismas. El medioambientalista ve plantas, animales, agua y tierra como recursos. Lo que rodea al hombre se analiza en términos de utilidad, del fruto que se puede conseguir. El hombre se sitúa en el centro y posee el control.

Por su parte, la ecología ve a los humanos como parte de la propia naturaleza, como una especie más entre la red que conforman los seres vivos. Los ecologistas sostienen que cada ser tiene sus derechos, los mismos que goza el hombre por el mero hecho de existir. La ecología entiende que el hombre posee una enorme capacidad de cambiar y destruir pero que últimamente no está controlado.

La humildad es parte esencial de la ética ecologista.

El hombre forma parte de la red de seres que conforman la existencia. Cuando el hombre altera los sistemas naturales persiguiendo sus propias metas, estos cambios conllevan casi siempre pérdida de biodiversidad, de estabilidad y salud del sistema.

Por ello, el ecologista piensa que para conservar la salud de los ecosistemas naturales hay que mantenerlos alejados de la actividad del hombre.

En este sentido, la permacultura nos enseña a lograr abastecer nuestras necesidades partiendo de un espacio reducido de tierra en el que crearemos nuestro sistema sin modificar ni provocar pérdidas de estabilidad y manteniendo la salud del entorno.

El permacultor debe comprender que nunca llegará a la total comprensión del funcionamiento de un ecosistema natural, al menos no con el apoyo de métodos científicos que analizan los componentes por separado esperando comprender de esta forma el conjunto.

Un ecosistema natural posee muchas partes y sus interacciones resultan complejas. El conjunto es demasiado amplio para entenderlo de una forma científica.

En ocasiones conviene respetar y confiar en la intuición, otras veces resulta mejor reconocer que no sabemos.

Para conocer el funcionamiento de un sistema pueden servir los métodos reduccionistas que, pese a resultar incompletos, pueden ayudar a comprender un conjunto complejo de interacciones como es un ecosistema natural.

About the author