“¿no han leído lo que Dios les dijo a ustedes: “Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob” ? Él no es Dios de muertos, sino de vivos.”Dios no es Dios de muertos sino de vivos, nuestra vida esta escondida en Jesús. Que hermosa esperanza la que tenemos los que descansamos en Él, la muerte no es el punto final, es tan solo una coma en medio de la eternidad.Es el comienzo de algo aún más maravilloso, porque al sonar la trompeta seremos resucitados para recibir al Señor Jesús en los aires.Los seguidores de Cristo no lloramos la muerte como quienes no tienen esperanza, tampoco la idolatramos, lo que celebramos es la vida, la esperanza, proclamamos la VICTORIA de nuestro amado sobre la muerte, la muerte vencida esta.Por eso los hijos de Dios no tenemos temor a nada, incluso si es necesario morir por nuestra fe estamos dispuestos a hacerlo, porque lo peor que puede pasar que es la muerte, ya fue cubierto por Dios, ¡ya fue solucionado en Jesús!Así que, ¿cómo podremos temer?, ¿cómo podemos vivir vidas en temor, escondidos de lo que “satanás” pueda estar o no haciendo? ¿cómo podemos huir a los desafíos de esta era?Por el contrario los enfrentamos con valentía, no por nuestros propios méritos, pero porque descansamos en la esperanza de que Aquél que resucito a Jesús de los muertos, hará lo mismo con nosotros.Camina sin temor, en la esperanza de la resurrección, ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿morir? eso cubierto está, ¿qué te detiene?-Inspirado en el devocional Tiempo con Dios del 3 de Marzo de 2016, Mateo 22:23-33