El consumo agudo de alcohol produce un estado corporal que se define vulgarmente como borrachera. En esta se ven implicados los principales órganos corporales, entre ellos el cerebro que resulta intoxicado por el alcohol, de ahí que la persona borracha muestre su torpeza mental y su poca capacidad para mantenerse en pie. El estómago resulta agredido y debe expulsar todo lo ingerido, de ahí los vómitos son los principales manifestaciones de la borrachera.
¿Qué es alcoholismo?
El consumo frecuente de alcohol conlleva a una manera de drogadicción conocida como alcoholismo. El alcohólico siente la necesidad de beber porque ha desarrollado el fenómeno de adicción al alcohol. El alcoholismo se produce por beber demasiado durante un periodo de tiempo prolongado, cuya duración dependerá de la naturaleza del individuo particular.
El proceso de creación de dependencia, independientemente de su duración, es el mismo: al principio se produce una gran tolerancia al alcohol en la que el bebedor parece tener una capacidad infinita para el metabolizardo sin que afecte a su organismo. El bebedor comienza a darle mayor importancia al alcohol hasta el punto de no poder llegar a vivir sin ella.
Las personas alcohólicas no pueden abandonar la droga de golpe, necesita un tratamiento médico y psicológico. De lo contrario puedes experimentar un trastorno médico conocido como “DELIRIUM TREMENS” que es la forma más grave de abstinencia a una droga.
Consecuencias del Exceso Consumo del Alcohol
Daños Físicos
Daños en el Hígado: El hígado es uno de los órganos más afectados por el consumo del alcohol, dado que es el encargado de limpiar las toxinas de la sangre. El beber puede provocar enfermedades en las que las células del hígado se mueren y se sustituyen por otras fibrosas en las que no realizan su función.
- Daños en el Pancreas: Las principales inflamaciones del pancreas, además de los problemas de vesícula y de riñón son producidas por el alcoholismo.
- Hipertensión: El alcohol aumenta la presión arterial, algunos médicos considera que un poco del alcohol mejora la circulación de la sangre y previene enfermedades del corazón pero el alcohol perjudica este organo y puede causar graves lesiones en él.
- Depresión: El alcohólico se aísla cada vez más de la sociedad y se vuelve cada vez más solitario. Cada vez va adquiriendo un carácter más depresivo, y en muchas ocasiones puede llegar al suicidio.
- Problemas Digestivos: El alcohol es uno de causantes principales de la irritación en el aparato digestivo. Al atacar las mucosas digestivas puede provocar vómitos acidez y a veces úlceras con sangrado.
- Aumento de Cánceres Digestivos: Al atacar las mucosas digestivas puede provocar cáncer de boca, esófago, estómago y cólon.
- Problemas Sexuales: El alcohol puede producir problemas de erección en los hombres e impide mantener relaciones sexuales de forma satisfactoria y en las mujeres favorece la pédida de menstruación.
- Daños en el Feto: Las mujeres alcohólicas pueden tener el síndrome del alcohol fetal, se caracteriza por un mal desarrollo del feto en el que el recién nacido presenta problemas de conducta y capacidad mental.
- Daños en el Sistema Nervioso: El alcohol produce problemas irreparables en el sistema nervioso central y periférico que se manifiesta por medio de temblores, falta de coordinación y falta de memoria.
- Problemas Alimentarios: La consumición del alcohol perjudica la absorción de muchas vitaminas y minerales, por lo qu el cuerpo se resiente y se debilita y es más fácil de traer infecciones y enfermedades. Los alcohólicos suelen tener bajo hierro en la sangre, una mayor fragilidad osea y bajo nivel de azúcar en la sangre.
Problemas Psíquicos
Una persona alcohólica sufre mucho las consecuencias del alcohol. Tiende a ser una persona solitaria a la que no le gustan que le repriman su conducta, cada vez es más solitaria y tiende a caer en una depresión permanente. En muchas ocasiones suele llegar al suicidio. Puede aparecer demencia, ansiedad, episodios habituales de psicosis con juicios poco racionales de la realidad. Además de causar numeroso daños físicos y psíquicos en la persona alcohólica, el alcoholismo es un problema social grave. La persona alcohólica es una persona que no se rinde en el trabajo por lo que tiende a perderlo y pasar a formar parte de numerosos grupos de vagabundos, sin hogar ni empleo. La persona alcohólica también suele tener mala relación con la familia, abandona las obligaciones de casa, suele ser agresivo con los parientes o familiares. Además de desconfiado suele ser celoso con su pareja y violento con sus propios hijos.