Qué es y qué ventajas tiene el Social Learning

Publicado el 25 octubre 2016 por Javier Díaz Sánchez @javierdisan

El Social Learning no es una tendencia, sino una realidad muy palpable que está modificando la forma en que entendemos la formación y, especialmente, las metodologías basadas en lo online. Asumiendo en líneas generales las afirmaciones del modelo 70:20:10 (el 70% de lo que aprendemos se obtiene vía experiencial, el 20% mediante las interacciones con los demás y el 10% a través del aprendizaje formal), las posibilidades de la web 2.0 resultan más que evidentes  (medios y redes sociales, comunidades virtuales, blogs, videotutoriales, foros, presentaciones, videoconferencias múltiples, wikis… ¿Te haces ya una idea?). En definitiva, más que buscar una definición exacta de Social Learning lo que nos interesa saber es que se trata de aprender con y de los demás (ya sea de manera presencial u online).

En el ámbito de la formación e-learning, pensemos por ejemplo en cómo han impactado algunos de los medios sociales más conocidos. Frente a las tradicionales plataformas de formación online, basadas en estructuras y ritmos más rígidos y encorsetados, canales como Facebook, Twitter o LinkedIn ofrecen nuevas vías de colaboración entre alumnos, nuevas formas de presentar y desarrollar trabajos grupales, nuevos espacios de debate… Y he citado sólo tres, pero… ¿Y el enorme valor de una wiki colaborativa, basada en un proceso de mejora continua y participativa? ¿Y la posibilidad de crear hangouts entre grupos en Google+, para debatir sobre temas concretos? ¿Y el conocimiento compartido de las presentaciones online, que encontramos en SlideShare?

Cómo resalté al principio, la mayor parte de nuestro conocimiento no proviene del aprendizaje formal y de métodos de enseñanza tradicionales. De hecho, los seres humanos en general, y los adultos en particular, preferimos experimentar y aprender por nosotros mismos, buscando los recursos necesarios para ello. Esto es a lo que se refiere Daniel Pink cuando habla de la autonomía como factor vinculado a nuestra motivación. Y a nadie se le escapará que la autonomía es también determinante para entender un concepto muy mencionado en los últimos años, el de los PLE o Entornos Personales de Aprendizaje.

Ventajas del Social Learning

Conscientes de lo anterior, las plataformas de e-learning no han tardado en incorporar herramientas que faciliten este aprendizaje social. En mi opinión, las ventajas más importantes son las siguientes:

  • Los usuarios pueden participar activamente en la construcción de su experiencia, en lugar de limitarse a absorber pasivamente el contenido que se les ofrece.
  • El uso de herramientas colaborativas permite poner en juego habilidades como el trabajo en equipo, un factor determinante en otros contextos de la vida.
  • El contenido se percibe como algo dinámico y que puede ser fácilmente actualizado.

Social learning en el entorno corporativo

Empieza a ser normal que las empresas fomenten escenarios de aprendizaje gestionados en gran medida por los propios usuarios ya que este empoderamiento ayuda a que tenga lugar una auténtica transferencia de conocimientos. Las comunidades de práctica, de las que hablaré en otro post, se basan precisamente en el aprendizaje social y están demostrando su utilidad entre los profesionales. Ahora bien, que estemos abriendo nuevos canales para que fluya el conocimiento y se produzca este aprendizaje por la vía informal no significa que los programas de formación tradicionales carezcan de utilidad. De hecho, pueden y deben ser complementarios pero para eso necesitamos diseñar una estrategia global de formación en la que el Social Learning sirva como catalizador del impulso a aprender y colaborar con otras personas.