En el centro de la nebulosa del cangrejo, a unos 6500 años luz de distancia de la Tierra, podemos encontrar una estrella de neutrones como resultado de la explosión
El pulsar de la nebulosa del cangrejo se ha revelado como un objeto más interesante de lo que pensábamos. Un equipo internacional de científicos ha detectado rayos gamma procedentes de dicha estrella, la energía de dichos rayos es la mayor que se ha detectado hasta la fecha proveniente de un pulsar. El trabajo de la investigación ha aparecido publicado en Science y lleva por título Detection of Pulsed Gamma Rays Above 100 GeV from the Crab Pulsar
Detectar rayos gamma muy energéticos no es una tarea fácil, es más, ni siquiera los detectamos de forma directa. Para detectarlos necesitamos de la atmósfera de nuestro planeta, la cual actúa como una chivata. El tipo de telescopio que se usa recibe el nombre de telescopio Cherenkov. Los fotones de rayos gamma que alcanzan la Tierra provenientes de distintos fenómenos cósmicos, golpean la atmósfera, como resultado de esa interacción se genera una lluvia de partículas subatómicas, estas partículas emiten pequeños destellos de luz, esos destellos son lo que detectan los telescopios Cherenkov.
El telescopio usado en la observación de la nebulosa del cangrejo es el VERITAS, que en realidad es un conjunto de cuatro telescopios Cherenkov de 12 metros de diámetro cada uno de ellos, lo que le convierte en el telescopio de rayos gamma más potente del hemisferio norte.
Los pulsos de rayos gamma detectados tienen energías entre 100 y 400 Gigaelectronvoltio(GeV), lo cual supera con creces la máxima energía detectada con anterioridad en la nebulosa del cangrejo la cual alcanzaba el valor de 25 GeV. La verdad es que la unidad de GeV no resulta muy intuitiva y es difícil hacerse una idea de la cantidad de energía implicada. Para hacernos una idea podemos hacer algunas comparaciones. Fotones con una energía de 100GeV son un millón de veces más energéticos que los fotones que se usan para hacernos una radiografía (los famosos rayos-X). Si comparamos estos fotones de entre los 100 y 400 GeV con los fotones de la luz visible, el resultado es más espectacular, estos fotones son casi un billón de veces más energéticos que los fotones que forman la luz visible. Y aquí es donde reside la sorpresa, no tenemos una forma de explicar como se están generando estos rayos gamma tan energéticos en el pulsar.
Se han propuesto modelos que podrían explicar este fenómeno pero para saber si son correctos vamos a tener que esperar a una nueva generación de observaciones, como se suele decir coloquialmente, la paciencia es la madre de la ciencia.
Crab Nebula picture Credit: David A. Aguilar (CfA) / NASA / ESA
Ismael Pérez Fernández.