La estancia de Spider-Man en el cine ha sido exitosa desde sus inicios donde un visionario como Sam Raimi llevo a la gran pantalla al arácnido y posteriormente tejiera una trilogía venida a menos que culminaría con un reinicio necesario. El cambio generacional ha sido puesto en debate más veces de lo necesario y aunque los números no le vengan a dar la razón a Sony sobre haber apretado tan rápido el botón de reebot, ¿es en verdad tan mala la saga de The Amazing Spider-Man? No, no y mas no. Pero vamos a analizar un poco más a detalle lo bueno y lo malo que ha traído Webb y compañía al trepamuros.
Lo bueno
El castingPrimero lo primero. Cuando en 2010 se anuncio a un no tan joven y desconocido Andrew Garfield para interpretar a Peter Parker más de uno tuvimos nuestras dudas. El tiempo y dos películas en la espalda las despejaría. Si es Andrew quien debe llevar la máscara. Es su compromiso, conocimiento, y sobre todo su pasión por el personaje quien lo revalida como el Peter Parker definitivo. A su lado esta Emma Stone, quien llego como una promesa y logro reafirmar que Gwen Stacy tiene encanto y de sobra. Sally Field, Martin Sheen, Jamie Foxx, Denis Leary… por mencionar a algunos, son muestra de que el estudio se ha tomado las cosas en serio y opto por una baraja de actores más establecidos para sacar adelante a la pareja de protagonistas.
Spider-ManApegándose a los comics y a la vez reinventando al personaje, guionistas, director y actor han hecho de este nuevo Spider-Man, el trepamuros que todos queremos ver. Están las poses, el sentido del humor, el heroísmo, la responsabilidad, los lanzaredes, la ciencia… ¡todo! Ya dos cambios de traje, porque para gustos los colores, pero si en TAS se proponía algo nuevo, en TAS2 mas realismo y apego a las viñetas no se puede.
Efectos especialesEste es punto que bien podría entrar a lo cuestionable de la película ya que, hay una gran mejoría con respecto a lo hecho en la anterior trilogía pero, sigue pareciendo quedarse corto en comparativa a otros blockbusters de superhéroes. No obstante el trabajo de los dobles de riesgo ha sido impecable y me atrevo a decir que se pone un escalón arriba de cualquier otra producción de dicha índole. Así, el filmar en exteriores y llevar a cabo una escena directa desde un rascacielos es bastante meritorio en estas épocas de pantalla verde.
Es parte de un todoEs cierto que el argumento se ha ido complicando a tal grado de no saber lo que en realidad Marc Webb nos quiere contar, pero la astucia de elaborar una trilogía y todo un universo arácnido en el cine es de aplaudir. El futuro nos dirá que tan bien le salió el truco a Sony. Hasta ahora, va de gane.
InnovaciónUn punto muy desprestigiado por toda la comunidad de críticos y fanáticos. Si algo ha tenido la saga de Amazing es innovación, algo con lo que Spider-Man ha vivido siempre. Puede agradar o no el hecho de sugerir una historia romántica entre protagonistas, pero, ¿qué otra película se ha arriesgado tanto con eso? Y aparte de todo, ¿qué otra cinta de superhéroes lo ha llevado a cabo de manera tan correcta? El material viral, la narrativa, la composición de elementos, demasiadas cosas que pasamos por alto.
El mensajeAl final Spider-Man se resume a esto: “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. Puede que la mítica frase salida de las páginas finales del Amazing Fantasy 15 no esté presente como tal en esta saga, pero el mensaje se puede apreciar desde un inicio. El don, la maldición que representa ser Spider-Man no se puede dejar a un lado y en Amazing lo hemos aprendido de la mala manera. Tú nunca podrás ser feliz Peter Parker y cuando así parezca, el destino te volverá a tirar para levantarte una y otra vez.
Lo cuestionableDirección Marc Webb sigue siendo el punto que mas brinca en todo este asunto. Ha brindado aspectos interesantes y brillantes a la saga; su lado más humano junto con su inalcanzable exploración sobre el amor le han valido sacar adelante a Peter Parker y Gwen Stacy, como en su época lo hiciera Stan Lee y John Romita, un par de leyendas. Pero también, por otro lado, su inexperiencia en cuanto a grandes producciones se refiere ha mermado las dos cintas. No termina por sacar todo el potencial visual que uno esperaría de Spidey, un lado que Raimi por ejemplo, si aprovecho.
El argumentoComo decirlo: si pero no. Hay algo que no termina por cuajar en el argumento base de esta saga y que va estropeando las salidas de apoyo. Demasiadas ramas argumentales, personajes bien establecidos pero poco aprovechados, un sinfín de posibilidades que no terminaran por desarrollarse por falta de tiempo son parte de los mil y un aspectos que podríamos cuestionar del enredado argumento. Con todo y todo, termina siendo bastante interesante. Esa reinvención de la que hablaba previamente saca adelante muchas cosas. Ambos finales (TAS y TAS2) son bien elaborados y tantean un futuro interesante.
La músicaDe antemano sabíamos que se hiciera lo que se hiciera, nada ni nadie superaría la banda sonora de la trilogía pasada, pero el intento se hizo. Primero fue James Horner, quien agrego su melodía clásica a una historia de corte juvenil en TAS. Después Hans Zimmer golpeo nuestros sentidos con su fuerza al mero estilo de la competencia. Pero ni uno ni otro ha dado el golpe de autoridad que se esperaba. Se sigue perdiendo entre las miles de bandas sonoras que tiene Hollywood actualmente. Lo maloEl villanoY si, el gran fallo de la saga es el elemento más importante si uno quiere tener el éxito descomunal que ha tenido otros: el villano. Ni Lizard, Electro, Rhino y el prometedor Goblin de DeHaan se establecen como grandes villanos. Este es un mal que la gran mayoría de películas basadas en comics tiene, falta con mirar una cinta de Iron Man. El ingrediente extra viene de los villanos. Y si, tampoco la saga de Sam Raimi tenía buenos villanos. Seguimos esperando un villano que sea malo y deje a un lado la formula Marvel. ¡Seguimos esperando un Joker!
El marketing¡Como le ha costado a Sony vender su producto! Con miles de spots televisivos, cero privacidad en el rodaje, trailers extendidos que revelan absolutamente todo, el estudio ha tirado por la borda el elemento sorpresa. No obstante, el estudio anuncia proyectos con demasiada anticipación. Este es el punto más débil de Spider-Man con respecto a la competencia: la forma de venderse. Esa es la clave por la cual no se han logrado los números de taquilla. Hay un pésimo marketing atrás de la saga.
El elemento sorpresa¿Cuál ha sido el elemento sorpresa de la saga? ninguno. No hay nada que resalte de otras películas, nada que no hayamos visto y nada que rescate el eterno argumento entrelazado. ¿Si en vez de anunciar una tercia de villanos en TAS2, lo hubiéramos descubierto en el cine? Eso habría sido espectacular. Las altas expectativas que uno se crea a lo largo de la promoción se van apagando al entrar el cine para ser solo satisfechas a secas.
A estos aspectos se pueden sumar varios más y entraríamos al terreno del debate, pero no hay duda de una cosa: Amazing Spider-Man resulta más buena que mala. Se le pueden contar los puntos flojos con los dedos de la mano y todos tienen solución inmediata. Hay material para hacer sentir que se puede lograr una gran película -del tamaño de los gigantes actuales- en un futuro.