Aquel grupo de jóvenes talentos estaba formado por Adam Szalai, Andre Schurrley Lewis Holtby. Se hacían llamar los Bruchweg Boys por la peculiar forma de celebrar los tantos que cualquiera de ellos marcaba, posando cual grupo musical. El nombre venía dado por la calle donde se encontraba el antiguo estadio del Mainz 05 y era un guiño a los Backstreet Boys.
El excelente comienzo de los dirigidos por Thomas Tuchel, igualando el récord de Bayern (1995) y Kaiserslautern (2001) de siete victorias en los siete primeros encuentros ligueros, aupó al equipo a las primeras posiciones y les llenó de moral. El joven técnico dio con la tecla adecuada y logró el equilibrio perfecto entre una defensa sólida y un juego de ataque alegre y con talento.
Schurrle era canterano del Mainz, Szalai llegó en enero de 2010 después de un paso sin pena ni gloria por el Castilla, pero lo que realmente fue la guinda del pastel fue la llegada, cedido en julio de ese mismo año, desde el Schalke de Lewis Holtby que aportó la magia necesaria. Sami Allagui completaba la vanguardia del equipo palatinado, sumando un buen número de goles decisivos.
Tras la magnifica campaña la sociedad se disolvió. Holtby volvió al conjunto minero, donde nunca acabó de consolidarse y para más inri su progresión se vio cortada por la irrupción de Julian Draxler, por lo que fue traspasado en enero de 2013 a la Premier League. En el Tottenham su rendimiento está siendo irregular y no ha acabado de asentarse en el once.
Andre Schurrle fue traspasado al Bayer Leverkusen a cambio de unos 12,5 millones de Euros. En las dos campañas en el conjunto de la aspirinase convirtió en indiscutible y se ganó, gracias a su rendimiento, un traspasó al Chelsea. A las órdenes de José Mourinhono ha logrado hacerse con un puesto de titular, pero el técnico de Setubal lo considera importante como recambio, siendo una de las primeras opciones saliendo desde el banquillo.
Por su parte Szalaiha sido el último en abandonar el Coface Arena. Tal vez su proyección se vio frenada en seco al romperse el ligamento cruzado de la rodilla en enero de 2011, lo que le obligó a estar en el dique seco durante casi un año. El pasado verano puso rumbo a Gelsenkirchen donde se ha beneficiado de la baja de Huntelaar para sumar un buen número de minutos, aunque sin demasiada suerte de cara a gol.
No quiero acabar este texto sin acordarme de uno de los mejores entrenadores de Alemania. Thomas Tuchel ha llevado al Mainz a cotas inimaginables y continúa demostrando que es un gran estratega al que le gusta trabajar con los más jóvenes. Jan Kirchhoff, Marcel Riise, Shawn Parker o Nicolai Muller son algunos de los valores a los que este técnico ha dado la confianza necesaria para explotar sus habilidades.
Sin lugar a dudas, la historia del Mainz 05 no sería la misma sin la irrupción de los Bruchweg Boys, estos chicos descarados y con talento, a los que un técnico valiente dio la alternativa.
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