Vivimos en un mundo de constantes cambios a nivel económico. Cada día el entorno se vuelve más volátil y existe mucha gente que ha sido tomada por sorpresa y ha terminado en situaciones muy duras de las cuales no saben cómo salir.
Hace poco tiempo estuve en una de esas situaciones. Me encontraba desempleado, mi emprendimiento había fracasado y estaba envuelto en deudas de todo tipo, sentía que no podía encontrar la salida de ese oscuro túnel. Sin embargo, decidí que no iba a permitirlo, y aunque no tenía idea de qué hacer, hice lo mismo que está haciendo usted ahora, buscar una solución. Así que luego de investigar bastante, logré descifrar una estrategia que me permitió salir finalmente del agujero en que me encontraba.
Si usted se encuentra en la misma situación en la que yo estuve y está buscando salir de ella, le recomiendo prestar atención a los siguientes cinco pasos que le ayudarán a recuperar su estabilidad financiera en menos tiempo del que piensa.
Primer paso: No mienta.
Si usted se encuentra en una situación en la cual sus ingresos son menores a sus gastos, tiene facturas por pagar y utiliza una tarjeta de crédito para pagar la otra, es hora de aceptarlo y tomarlo en serio. Para algunos puede sonar un poco ilógico, pero es increíble la cantidad de personas que se mienten a sí mismas cuando se encuentran en este tipo de problemas financieros. Siguen pensando que, mágicamente, algo sucederá y les ayudará a salir del precipicio. No obstante, puedo decirles por experiencia propia que eso es algo que casi nunca (por no decir nunca) pasa.
Debo advertirle que necesitará fortaleza para salir de la quiebra, y una parte fundamental de esa fortaleza es ser sinceros con nosotros mismos y aceptar que estamos en graves problemas. Además, debemos entender que si no hacemos algo, seguiremos en la misma trampa de arena indefinidamente. ¡Basta de decir que todo va a mejorar! la esperanza y la fe son buenas, pero no funcionan sin una acción contundente de nuestra parte. Así que mi primer consejo es que asuma con responsabilidad la realidad de su situación.
Segundo paso: Tomar acción inmediatamente.
Éste es otro punto que puede sonarle poco lógico a alguien que no ha pasado por esta situación, sin embargo, aquellos que la hemos vivido sabemos que a veces puede ser tan dolorosa y abrumadora, que terminamos por evadir y postergar nuestra responsabilidad en el asunto.
Seguimos haciendo los mismos gastos innecesarios, pidiendo préstamos, o dándonos lujos que realmente son contradictorios a nuestro interés de salir de la bancarrota. Esta estrategia puede parecer dolorosa, y lo será, pero le garantizo que ese rato de sufrimiento le permitirá llevar la vida que desea.
Es momento de ser contundente. Lo que hay que hacer es comenzar ¡YA! a revisar las facturas, las cuentas, los ingresos y los gastos. Usted debe saber exactamente en qué está gastando cada centavo que reciba. Comience por hacer una lista de sus gastos básicos, como por ejemplo la comida, educación de sus hijos, servicios, etc. Enumere también los gastos generados por tarjetas de crédito, préstamos y otras obligaciones. Una vez que tenga todo bien organizado, comience a remover sin piedad todo lo que no necesite.
Eliminar gastos será muy doloroso, pero debe tener la convicción de que podrá recuperar todas sus comodidades cuando vuelva e encontrarse en una posición de verdadera estabilidad económica. Si ha llegado hasta este punto de la lectura, es porque probablemente usted se encuentra en un problema financiero. Puede pensar que esos pocos pesos de los canales extra de su operador de cable, o esas cenas fuera de casa los domingos no hacen la diferencia, pero si que la hacen. Es hora de despedirse de esa fuga innecesaria y utilizar esos recursos (aunque sean mínimos) para poder salir de su situación.
Algo que ayuda mucho en esta situación, es preguntarse qué pasaría si no compra algo, justo antes de comprarlo. Si la respuesta es “nada” entonces no lo necesita.
Tercer paso: Pedir ayuda.
Al comenzar este post, dije que esta estrategia les ayudaría a salir de la quiebra, pero nunca dije que les iba a gustar. Sé personalmente que va a ser muy doloroso. Para mí, lo fue bastante, pues soy de las personas a quienes no les gusta pedir ayuda. Sin embargo, es muy necesario hacerlo, ya que ese sufrimiento nunca será mayor al de estar quebrado, así que es un sacrificio que vale la pena.
Es importante tragarnos nuestro orgullo y dejar saber a las personas que estamos en una mala situación. No digo que deba ir a colocar un anuncio, ni a pedir caridad en la calle, solo quiero hacerle entender que las personas quienes le quieren y se preocupan por usted, no pueden hacer nada para ayudarle si no saben que usted está mal, mucho menos, si lo ven gastando dinero en cosas innecesarias. Yo sé muy bien que esos gastos ayudan a aliviar el dolor de estar quebrados, pero al mismo tiempo nos mantienen atados a esa terrible realidad.
Puede parecer algo molesto, pero es hora de hablar con sus padres, hermanos, hijos o amigos. Esas personas cercanas a usted deben saber que está pasando por una situación temporal que está dispuesto a superar. De otra forma, nadie va a venir a darle una solución o ayuda si no tienen idea de que usted la necesita.
Pedir ayuda no significa necesariamente pedir dinero, es muy importante recalcarlo. Hay ayudas mucho más valiosas, pues una simple inyección de efectivo no va a curar su enfermedad, será solo un calmante temporal. Cuando hablo de solicitar ayuda, hablo más bien de ideas y oportunidades. Si sus amigos saben que usted lucha financieramente, seguramente no le pedirán que vaya con ellos a lugares extravagantes. Si sus hijos saben que usted tiene dificultades, probablemente le ayuden a minimizar sus gastos. Comience a buscar oportunidades para un mejor empleo, pregunte por nuevas oportunidades y solicite consejos a personas que puedan darle una buena recomendación. Tal vez esa oportunidad de mejora que tanto busca, está más cerca de lo que piensa.
Cuarto paso: ¡Comience a ahorrar ya!
Puede sonar un poco insensata la idea, pero créanme, no hay nada más acertado. Normalmente, la gente espera salir de la quiebra para luego comenzar a ahorrar, a invertir y a mejorar. Lo que a la mayoría le cuesta ver, es que si no comenzamos a ahorrar ahora mismo, y a tener disciplina con nuestro propio dinero, que en este caso será muy poco porque estamos quebrados, mucho menos podremos hacernos cargo de más dinero en el futuro.
Por otra parte, ahorrar nos permite dos cosas fundamentales. La primera, es prepararnos para posibles dificultades. La segunda, es prepararnos para posibles oportunidades. Ahorrar tan solo el 10% de nuestros ingresos al momento en que los recibimos y sin tomarlos en cuenta para nada más, nos abre un camino de oportunidades que aumenta con cada nuevo aporte que hagamos a ese fondo. De esa forma, el día que se nos presente alguna oportunidad de inversión, estaremos preparados para multiplicar nuestro dinero.
Quinto paso: “Repotenciarse”
En este punto de nuestro camino, hemos enfrentado nuestra cruda realidad, por lo que somos capaces de cambiarla. Hemos logrado reducir al máximo nuestros gastos, lo que nos permite optimizar nuestros recursos. Hemos notificado nuestra situación a nuestros seres queridos, logrando así un apoyo fundamental para encontrar nuevas oportunidades, y hemos comenzado a construir nuestros ahorros que un futuro nos servirán para invertir y multiplicar nuestro dinero. ¿Qué falta?
Es hora de comenzar a subir nuestro nivel de ingresos. Si actualmente usted tiene un empleo que no le permite generar lo suficiente y además le consume demasiado tiempo, es hora de encontrar algo mejor. Si usted siempre ha deseado crear una empresa propia, es hora de comenzar a hacerlo. Tal vez esté pensando que no es para nada un buen momento, pero justamente, porque no es buen momento es la hora de comenzar. Es momento de evolucionar.
Yo no tengo idea de cuál es su carrera u ocupación, es por eso no puedo indicarles el siguiente paso. Usted debe preguntarse: ¿Qué necesito aprender para subir al siguiente nivel? ¿Cuáles son las habilidades que requiero para encontrar ese ascenso que me permitirá tener un mejor salario? ¿Qué me falta saber para poder iniciar mi negocio? ¿Qué necesito aprender ahora para empezar a ganar más dinero? Esas respuestas pueden ser distintas para cada quien, pero una vez que lo sepa, comience de una vez a mejorar sus habilidades, solo eso le permitirá salir de este atolladero.
Cuando estamos quebrados, lo normal es sentirse enojado consigo mismo y presionarse demasiado para conseguir resultados instantáneos. Sin embargo, las cosas que valen la pena por lo general llevan su tiempo. A veces nos cuesta comenzar a aprender algo nuevo, pues pensamos que nos llevará demasiado tiempo y que necesitamos resolver nuestra situación ahora mismo, no obstante, el no comenzar ahora mismo es lo que nos retiene en la misma situación semana tras semana, mes a mes, y a veces, año tras año. Pasa el tiempo y dejamos todo para después y al final terminamos perdiendo mucho más tiempo del que pensábamos. Evada los miedos y las excusas y comience lo antes posible.
Esta estrategia puede resultar bastante sencilla y obvia, pero muchas veces, como en mi caso, hace falta que alguien nos sacuda un poco y nos haga ver que estamos estancados, y que la única forma de salir del abismo es comenzar a construir con paciencia cada escalón que nos permitirá llegar al nivel que tanto deseamos y merecemos.
Espero que la información les haya sido tan útil como lo fue para mí, no olviden compartir el artículo, de esa forma puede servirle a alguna otra persona que se encuentre en la misma situación.
¡Mil gracias por su atención! Y recuerden… ¡Hay que comenzar ya!