Qué hacer cuando tienes un dilema entre libertad y estabilidad.

Por Coach De La Profesional @scientistcoach

Me preguntaba una clienta de mi programa PQH:

¿Cómo nos replanteamos el concepto de la estabilidad/seguridad para que no esté reñido con la libertad?

También he seguido reflexionando sobre el concepto de libertad, dándome cuenta de que hay muchos tipos de libertades: de movimiento, de acción, de pensamiento…

¿Necesitamos de todas ellas, o podemos sacrificar algunas por la estabilidad (emocional, material, personal…)? ¿Cómo interrelacionamos las libertades importantes (para nosotros) con las estabilidades importantes (para nosotros) sin que entren en conflicto?

La pregunta que me haces es muy, muy buena. Así que vamos a ello.

Como preámbulo, tienes que tener claro qué es exactamente “libertad” para ti.

El concepto puede variar para cada persona. Yo, por ejemplo, no necesito trabajar cada mes desde un país diferente para sentirme libre y hay personas que sí. 

O tener un yate o tener millones.

Para mí libertad es hacer lo que quiero, sea lo que sea lo que quiero.

Puede ser estudiar unas oposiciones y vivir con un sueldo fijo y estable porque eso me permite hacer otras cosas en mi tiempo libre con la seguridad de tener la espalda cubierta, por ejemplo.

O puede ser cambiar de profesión siempre que me apetezca. O vivir en distintos sitios, o irme a Hawai a montar una escuela de surf, etc, etc.

Para mí libertad es elegir yo lo que quiero.

¿Qué es para ti libertad, cómo te sientes o te sentirías si fueras libre?

Libre no tiene por qué ser inseguro o arriesgado.

Y, a veces, asociamos ese concepto a libertad. O la sociedad hace que lo asociemos con imágenes de dinero, mar, montañas escarpadas, riesgo, diversión.

Para mí ser libre es hacer lo que tú quieras.

Que llegue tu último día y digas: pues oye, he sido feliz, he elegido mi camino, he hecho lo que quería. Y me da igual haber fracasado en esto y esto porque al menos lo intenté.

La cuestión aquí es si tu concepto de libertad sí es el de tener tu propio negocio, no tener horarios ni jefes, no depender de nada, llevar un vida con más riesgos.

No es lo mismo riesgo que libertad. Y quizá quieras combinar riesgo y estabilidad.

Aquí entonces entra tu definición de estabilidad y seguridad.

Por ejemplo, hay personas que necesitan un buen colchón económico para sentirse seguras.

O un puesto fijo al menos x años. O tener un piso en propiedad.

Otras se sienten igual de seguras con menos dinero, alquilando y sin necesidad de nada muy fijo.

¿Y tú?

Define ahora qué es estabilidad para ti.

Y qué es seguridad. Para ti.

Sé especifica. ¿Cuánto dinero, qué condiciones?

No es ni bueno ni malo, simplemente tienes que conocer lo que quieres y necesitas.

Y basarte en eso.

Y si quieres riesgo y a la vez mucha estabilidad y no encuentras cómo combinarlo…

Vas a tener que elegir.

Quedarte segura y estable y perder algo de riesgo. O añadirlo a tu vida de otras formas

¿Qué te aporta el riesgo, qué buscas con él? Diversión, sentirte viva, sentir que haces lo que quieres.

Rebusca hasta dar con la respuesta y encuentra otra forma menos arriesgada de conseguir esa sensación. Hay muchas.

O elige riesgo.

Échate la manta a la cabeza y prueba si te gusta. Tenemos mucho miedo a cambiar y probar. Pero la vida es cambio.

Cambias, pruebas y si no te gusta vuelves a cambiar.

Quizá no sea fácil ni rápido. Pero, ¿qué alternativas tienes?

¿Quedarte como estás? Si te gusta esa opción, quédate y disfruta. Has elegido tú. Libertad.

Si la idea te rechina…

A cambiar.

Y sobre eso ya este artículo ; )

Y si quieres ayuda para decidir qué es lo que de verdad quieres en la vida, esto es para ti.

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