El feminismo se define como un conjunto de movimientos económicos, políticos, sociales y culturales que buscan la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Sin embargo, aunque la mayoría de las personas estarían de acuerdo en que las mujeres merecen igualdad de derechos, muy pocos se identifican como feministas. Dándole una vista rápida a algunas estadísticas de México, España e Inglaterra, descubrí que aunque en los 3 países la mayoría de los ciudadanos están de acuerdo en que se debe buscar la equidad de género, la mayoría no se considera feminista, ni siquiera las mujeres. De acuerdo a The Independent, en Inglaterra 1 de cada 5 personas creen que ser llamado feminista es un insulto, y aunque el 81 % de la población considera que es necesario hacer más por los derechos de las mujeres, la mitad dice no ser feminista. En España, las encuestas sitúan al 70 % de la población a favor de la igualdad, pero solo el 4% de las mujeres se consideran feministas. En México, la situación es más o menos la misma, aunque el 77% de las personas creen que se debe fomentar la igualdad entre hombres y mujeres, el 80% considera que el feminismo está mal visto, y la mitad de las mujeres no se considera feminista. Ahora bien, claramente esto muestra, más que el porcentaje real de las personas feministas, una gran ignorancia respecto al tema.
Hablemos del origen del problema, obviamente la similitud de la palabra feminismo con la palabra machismo no ayuda mucho, pero ¿en el pasado tuvo la palabra feminismo mayor aceptación? ¿Acaso sucedió algo que hizo que la gente comenzara a rechazar la palabra? Respuesta corta: No. La palabra feminismo no era algo bueno en el pasado.
La primera vez que se utilizó el vocablo feminismo el contexto y significado eran completamente distintos de los de la actualidad. El primer registro de su uso data de 1871, cuando Ferdinand-Valérie Fanneau de la Cour, lo utilizó en su tesis, Du fèminisme et de l’infantilisme chez les tuberculeux (Del feminismo y el infantilismo en los tuberculosos), el término feminismo fue utilizado en aquella época para referirse a una condición médica que se produce en los hombres generando la debilitación del individuo y finalmente una feminización del cuerpo masculino. Sin embargo, la palabra no fue muy conocida ni utilizada, debido a su contexto especializado.
El que realmente diseminó la palabra ya con un sentido político, fue Alejandro Dumas hijo, quien lo utilizó en sus panfletos para burlarse de los hombres que apoyaban el movimiento que reconocía los derechos ciudadanos de las mujeres. No fue hasta 1882 que una feminista francesa participando en el movimiento para darle el voto a las mujeres, Hubertine Auclert, retomó la palabra feminismo pero con el significado actual.
En mi opinión, elegir la palabra feminismo para describir al movimiento que busca la equidad de género, no fue uno de los mayores aciertos del mundo. Sin embargo, es eso, una palabra. Es claro que si le preguntas a una mujer ¿Estás a favor de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres? Te va a decir que sí, pero si le preguntas si está a favor del feminismo, es muy probable que diga que no. La pregunta clave es ¿Sabías que feminismo solo significa buscar la igualdad de derechos entre hombres y mujeres?
El otro problema con la palabra feminismo, más que su contexto histórico, es el hecho de que describe un movimiento muy grande que ha tenido muchos matices a lo largo de la historia. A pesar de que el movimiento feminista engloba todo lo que busca la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, muchas veces es reducido a la ideología del llamado feminismo radical o extremo. Por ser el que involucra más escándalos, también es el que ha llamado más la atención de los medios.
Para concluir, debemos recordar que feminismo simplemente es la búsqueda de la equidad de género por lo que una persona es feminista, cuando se reúsa a pagarle más a un hombre que a una mujer en un mismo trabajo, cuando educa a su hijos para que se dediquen al trabajo que más les guste sin importar si son hombres o mujeres, se es feminista cuando se levanta la voz ante cualquier tipo de discriminación en contra de una mujer. Ni siquiera se necesita ir a protestas para ser feminista. Aunque claro, las protestas tampoco son inútiles, y son una de las principales razones por las que ha habido cambios en las legislaciones machistas del pasado, concediendo cosas como el voto a la mujer.
Te dejo estos links si te interesa revisar las estadísticas:
https://www.independent.co.uk/news/uk/home-news/nearly-1-in-5-people-in-the-uk-think-being-called-a-feminist-is-an-insult-a6728446.html
http://agendapublica.elperiodico.com/feministas-de-sentimiento-pero-no-de-nombre/
http://www.nacion321.com/mujeres-2018/las-mujeres-mexicanas-quieren-igualdad-pero-no-se-definen-como-feministas