Comienzan las vacaciones y también el momento de hacer la maleta. Si normalmente suele resultar una tarea ardua, cuando se viaja con bebés y niños, aún se complica más. Por ello, lo fundamental es planificar y hacer una lista con todo lo necesario, pensando detenidamente lo que será útil para evitar así llenar la maleta con cosas de más o con algunas que, durante ese tiempo, ni siquiera llegaremos a utilizar.
Habrá que tener en cuenta la duración del viaje, la estación en la que viajamos, si nos alojaremos en casa de algún amigo o familiar o si en cambio pasaremos las vacaciones en un hotel, qué tipo de medio de transporte utilizaremos para llegar al destino... éstas y otras variables influirán a la hora de decidir qué meter o no en la maleta para así elaborar una lista perfecta de cosas imprescindibles que llevar.
Lo esencial en una maleta infantil
Una vez que ya esté dentro de la maleta la documentación necesaria para el viaje, el teléfono móvil, algunos contactos que puedan ser necesarios, un botiquín... habrá que decidir qué incluir en el equipaje para el pequeño.
En el caso de los bebés habrá que llevar una muda para cada día que dure el viaje y alguna más por seguridad, así como biberones, pañales, baberos, algún chupete, toallitas, un termo, cremas, colonia... También será útil un cambiador, preferiblemente desechable o reusable, así como una cuna portátil, en caso de que ya se sepa que en el destino no la hay.
Por otro lado, si el pequeño ya anda, lo ideal será incluir prendas cómodas y que sean sencillas de combinar para que no sea necesario elegir un conjunto para cada día.
Asimismo, cuanto más mayor sea el niño, se añadirán a la lista más juguetes, libros, cuadernos de dibujo... en definitiva, cosas que sirvan para distraer al pequeño, sobre todo, en los trayectos de viaje.
Sin duda, también será imprescindible que forme parte del equipaje el carro del pequeño y en caso de que se viaje en coche, el asiento de seguridad. Asimismo, pueden resultar muy útil en los viajes algunos de los modelos que existen hoy en día para transportar al bebé, tales como mochilas tipo canguro o para llevar en la espalda, sling, mei-tai...
Qué tipo de ropa que debemos llevar en la maleta
Por otro lado, además de todo lo dicho anteriormente, se tendrá en cuenta que, en función de la época en la que se viaje, se elegirán prendas de ropa o complementos propios de dicha estación. Es el caso de la protección solar, ropa de baño, sombrilla o parasoles para el coche, gorras o sombreros... en el caso de que sea verano o bufandas y gorros, camisetas polares, cremas de protección para cara y labios, paraguas, botas de agua, chubasqueros... si, en cambio, el viaje tiene lugar durante la época invernal.
Aún así, independientemente del momento del año en que tenga lugar el viaje, los bebés y niños no deben pasen frío ni calor, es decir, que, aunque sea primavera o verano y haga calor, vendrá muy bien prevenir y llevar una mantita o jersey, por ejemplo. No se pueden controlar los cambios meteorológicos y por ello, ser prevenidos será la mejor arma a la hora de preparar la maleta, sin que ello implique, llegar a los excesos.