Hace unos días se estrenó la tercera temporada de Bates Motel, la serie de Carlton Cuse para A&E que nos sirve a modo de precuela algo extraña de la película Psicosis. Aunque no termino de acostumbrarme a ese choque temporal en el que se usan móviles y ordenadores de última tecnología para una precuela de la mítica película de Alfred Hitchcock que debería estar ambientada antes de los 60's -y que, además, tiene un toque muy retro a la hora de vestir- la segunda temporada acabó de lo más interesante y nos dejaba entrever que Norman Bates iba a sacar su lado más psicópata, ¿cumplirá la tercera lo prometido?
¡ATENCIÓN, SPOILERS!
Poco a poco y capítulo a capítulo hemos ido creciendo junto a Norman y siendo cómplice de sus crímenes. Lo de la profesora no era nada, y es que después de superar la prueba del polígrafo, este adolescente que había cometido algún que otro crimen sin saber realmente qué le ocurría, nos desvela su parte más psicópata. Sus pérdidas de memoria comienzan a tener sentido una vez nos deja presenciar cómo la imagen de su madre sale de él para susurrarle al oído que no se preocupe, que todo es cosa de ella.
Puede que al dejarnos al aire el verdadero trastorno de Norman la serie comience a tener fecha de caducidad. Pero es que esta tercera temporada promete, comenzando, nada más y nada menos, con la imagen de la profesora muerta a su lado mientras Norman está en el instituto. A lo que se suma la llegada de una nueva mujer al Motel, cómo no bastante sexy, y posiblemente una perfecta candidata ser la próxima víctima de Norman -o de su madre, según como se mire- que además no tiene mejor idea que comenzar a intimar con él mientras van en su coche.
En el fondo Norman empieza a darse cuenta de que no es capaz de resistirse y puede que quizá haya algo de esperanza en él cuando le propone a Emma (Olivia Cooke) estudiar los dos fuera del instituto y además le pide salir ¡por fin! Aunque seguramente eso signifique que ella también comienza a tener fecha de caducidad dentro de la serie.
La tensión entre los dos crece hasta el punto de que incluso el propio Dylan(Max Thieriot) les da un toque de atención, y es que no ve normal que un chico de esa edad siga durmiendo con su madre. Sin embargo casi al final del capítulo nos dejan ver que Norma no es tan consciente de ésto -nunca lo ha sido- y desobedece la recomendación de Dylan volviendo a meter a Norman ensu cama para que le abrace mientras duermen ya que está triste por la muerte de su madre, como si nada.
Pero la locura de Norman no será lo único que la tercera temporada nos deje ver, y es que el hermano de Norma regresa con la misma excusa de la muerte de la madre e intenta comerle la cabeza al pobre Dylan (que continúa metido en sus líos de tráfico de drogas mientras le da por escuchar Arctic Monkeys), y es que el hermano/violador/padre de su sobrino no va a dejar que Norma se salga tan fácilmente con la suya.
Por ahora poco nuevo nos deja ver la tercera temporada que apuesta por seguir desarrollando a los personajes. Un buen comienzo que no se mete en tramas inútiles y nos muestra lo que de verdad queremos saber, dejándonos con muchísima curiosidad al ver a Norman llegar solo al Motel en el coche de la nueva huésped.