Que parezca un accidente

Publicado el 21 agosto 2010 por Javierm

Al parecer, a Julian Assange han decidido apartarle de la vida semi pública que lleva por la vía de que tenga un accidente. La fiscalía sueca (ojo al parche) decidió por unas horas imputarle un delito de violación y otro de abusos de dos mujeres que no quisieron denunciar (ojo al parche reload). Tras unas horas de incertidumbre mundial, la fiscal general decidió que no había prueba alguna para imputarle esos delitos y por lo tanto anuló la orden de arresto que se había decretado y que no pudo cumplirse ya que no encontraron a Julian (ojo al parche again).

A uno estas cosas le recuerdan que la realidad acostumbra a superar la ficción. Hay una película de WilL Smith, enemigo público, donde un senador tiene un accidente clavándose una jeringuilla con veneno en la garganta que lleva descuidadamente un asesino a sueldo de la Seguridad Nacional con tan mala suerte que es grabado el suceso con la cámara de vídeo de un aficionado a los patos que posteriormente también tiene otro accidente.

Pues el suceso del portador de esa web llamada Wikileaks, que ha sacado a la luz miles de documentos secretos que demuestran las hazañas de los militares matando civiles a tutiplén en Afganistán, me la ha recordado.

Supongo que a estas alturas pocas aseguradoras darán un duro por Assange, que a buen seguro (valga la redundancia), debe ser el hombre del planeta más proclive a tener un accidente mortal.

Luego, cuando aparezca su cuerpo atropellado por algún satélite caído del cielo en medio de un carril bici habrá gente que vea fantasmas, claro.

Malpensados.