Sin duda con un perfume no vamos a fallar, es uno de los elementos más especial para todos por la llamada memoria olfativa que nos permite recordar momentos con la ayuda de los aromas de una forma más intensa y nítida. Esa es una de las variables que puedes utilizar a la hora de elegir un perfume, tanto para ti como para regalar si conoces bien a la otra persona.
Puedes decantarte por fragancias cítricas, son aromas frescos con notas altas de cáscaras de frutas como pueden ser la naranja, el limón o el pomelo que se complementan con notas florales de petitgrain o de flor de naranjo. Aunque son aromas frescos que pensaríamos más adecuados para el verano, la verdad es que en invierno también se venden mucho porque son perfumes ligeros que despiertan y elevan el ánimo. Si quieres un extra de energía o subirte el ánimo este tipo de fragancias son las adecuadas, es una de las razones por las que CK One de Calvin Klein o la famosa Eau de Rochas suelen ser de las más vendidas.
Por otro lado encontramos los perfumes dulces, uno de los más vendidos y conocidos dentro de esta gama es Angel de Thierry Mugler con una base de ámbar y notas dulces de praliné. En el mercado hay una gran variedad de perfumes dulces para todos los gustos, uno de mis favoritos porque me encanta el aroma a vainilla, es Good Girl de Carolina Herrera. Si quieres regalar un perfume con aroma dulce piensa que es lo que más le gusta a esa persona, el chocolate, el algodón de azúcar, la vainilla, el caramelo, etc. según ese dato podrás decantarte por uno u otro y acertarás seguro. En Navidad suelen regalarse muchos los que llevan canela, vainilla o miel porque recuerdan especialmente a los aromas habituales en estas fechas.
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