Virgina es abogada de profesión, algo no reñido con sus dos hobbys: la cocina y la fotografía. Por suerte, sus conocimientos y experimentos los comparte desde hace 3 años en “Sweet & Sour”, un blog con imágenes que ayudan mucho a quiénes se atreven a emularla.
Además, esta bloguera incansable participa en el proyecto colectivo Bake the World con Clara, del blog “Miss Migas”. Juntas nos invitan a un viaje por los diferentes panes del planeta. Para conocer un poco más sobre ella, os dejamos esta Entrevista Cocinista.
¿Qué no puede faltar en tu cocina?
Buena materia prima y mucho cariño. La buena cocina empieza por la calidad de los productos, pero no serían nada sin la magia que aporta el cariño que se pone al elaborarlos.
¿Dulce o salado? ¿Por qué?
Los dos. ¿Por qué elegir? Cada uno en su momento. Un buen salado siempre debe finalizar con algo dulce. Se nota que soy chicarrona del Norte y vengo de una familia con gusto por la buena mesa ¿verdad?
¿La estética es importante en la cocina?
Por supuesto. Dicen que primero se come con la vista y estoy totalmente de acuerdo. Aunque el paladar es lo fundamental, la imagen de un plato es prácticamente igual de importante. Un mismo plato presentado de formas distintas, ofrece distintas sensaciones globales a los comensales. Y la única razón es que, además de con el paladar, la comida se disfruta también con la vista.
¿Qué prepararías ante una visita inesperada?
Dependería del tipo de visita, la hora…. Eso es lo fundamental. Si son peques, por supuesto, galletas y algo de chocolate. Eso nunca falla y además siempre hay algo casero rondando por mis cajones. Pero si tu visita inesperada son adultos, en casa siempre hay huevos, patatas y verduras, así que ¿quién se resiste a unos buenos huevos fritos o a una tortilla de patatas acompañados de una buena ensalada con lo que en ese momento haya en la nevera?
¿El mejor sitio para cocinar?
Mi casa. Si me sacas de ella no me encuentro igual de a gusto.
¿Una canción para cocinar?
Ninguna en especial. Depende del estado de ánimo de cada momento, incluso del plato que tenga entre manos. Lo mismo me gusta disfrutar de una buena música clásica que inspira y relaja el espíritu, que cocinar con una canción ácida de Fito, si tengo día más peleón.
¿Cuál es tu puchero estrella?
Tengo unos cuantos, si solo tuviera uno en casa protestarían y mucho, con la cantidad de tiempo que dedico a la cocina. Pero si tengo que nombrar uno, en casa les gusta mucho la paella de mariscos que preparo, y aunque sea bilbaina y no valenciana, dicen que la bordo. Me gusta prepararla finita, con su socarrat al fondo. Quizás no sea la típica paella valenciana, de carne y verduras, pero está de vicio.El secreto: un buen caldo casero, arroz de calidad y buena materia prima, y por supuesto, mucho cariño.
¿En qué película te infiltrarías para probar su comida?
“Sin Reservas”, mientras veía la película era capaz de aspirar los aromas que salían de esas cazuelas y estaba deseando teletrasportarme a esa cocina y meter la zarpa en todos sus platos.
¿Con quién te gustaría compartir mesa?
Más que mesa fogones, y sería con David de Jorge. Buena cocina, buena conversación y muchas ganas de compartir y trasmitir ese gusto por la comida que él rebosa. No tengo el placer de conocerlo personalmente, pero estoy convencida de que nadie como él para disfrutar de un buen rato de fogones y de una buena sobremesa.
¿En la cocina se experimenta?
¡Siempre! ¡Qué sería de nosotros sin los experimentos gastronómicos! La cocina no hubiera avanzado lo que lo ha hecho, sino hubiera habido valientes que no se conformaron con lo que otros les trasmitieron.Yo personalmente cuando preparo una receta de un tercero, primero la preparo como esa persona lo aconseja, creo que es importante bucear en lo que pretende trasmitir, pero luego. lo siento, no puedo resistirme, la tuneo vilmente a mi gusto y experimento con ella.
Estás preparada para Bake the world… ¿cuál es tu pan favorito?
“Hornear el mundo” resulta fascinante y en “Bake the World” se unen dos de mis pasiones culinarias: la panadería y el conocimiento de técnicas y alimentos a lo largo y ancho del mundo. En cuanto al pan, no tengo un pan favorito, creo que no hay pan que no me guste. Pero cada uno en su momento y con su tipo de comida. Al pan creo que le ocurre un poco como al vino, a cada comida o plato le acompaña un tipo de pan. Pero sí te he de confesar que me fascina hornear panes con corteza crujiente, con carácter y migosos, con buena miga. El tratar de buscar ese sabor que cuando cierras los ojos te trasporta. Los panes planos me gustan por la infinidad de posibilidades que te ofrecen, pero el amasar, hornear y ver desarrollarse un pan migoso en el horno, no tiene precio, es pura magia.
¿A qué país viajarías para probar su gastronomía?
Aquí tengo el corazón dividido entre Líbano y La India. Ambos países me tienen simplemente enamorada. Mucha verdura fresca, sabores intensos, mezclas inimaginables.
Mójate… Recomienda un blog y una cuenta de Twitter.
Un blog… me pones en un aprieto, hoy en día hay tantos y tan buenos, que me resulta difícil. Pero hay dos que me fascinan. Uno es “El Oso con Botas”, que me tiene enganchada, buena cocina, buenas recetas y buena fotografía. Se nota que Raúl ha estudiado tanto cocina como fotografía. Y el otro es “Hecho en la Propiété”. Ana es panarra total y trasmite con su recetas y sus fotografías un aire rustico lleno de magia. En cuanto a una cuenta de twitter, no soy nada twittera, así que ya lo siento, no tengo recomendación.
¿Un restaurante que nunca olvidarás? ¿Por qué?
“Kimtxu”, un restaurante que acaba de abrir en Bilbao bajo la batuta de Iván Abril, en el que fusiona la cocina vasca y la oriental, un nuevo concepto de cocina, que no voy a poder olvidar fácilmente, no solo por el buen producto, buena elaboración y buena fusión de conceptos, sino porque consiguió sorprendentemente encandilar a mi marido, poco amigo de estas fusiones.