Pero este año es especial. No por la presencia de Cristiano Ronaldo y Messi entre la terna de finalistas, algo que hasta que se retiren, si no bajan de forma excesiva, será lo habitual, sino por la elección de Manuel Neuer como uno de los tres mejores jugadores del mundo durante el año que hace unas horas que nos dejó. En un mundo del fútbol de élite donde el juego ofensivo, los goles concretamente, tienen un peso tan grande en cada análisis medianamente serio, los jugadores de corte defensivo y los porteros paracen 'los malos de la película' en cuanto a que su buen hacer se liga, de forma equivocada, a lo que va en contra del espectáculo.
Si bien el patrón que ha llevado a Neuer a colarse en la final del Balón de Oro es el mismo que el de sus otros colegas bajo palos en, digamos, el fútbol moderno: las buenas temporadas previas ya mentadas junto a un hito importante con su selección. Kahn fue finalista en 2002 y principal responsable de que Alemania alcanzase la final y Buffon ganó el Mundial en 2006 siendo pilar junto a Cannavaro (a la postre ganador) del sistema defensivo del campeón. La diferencia que marca Neuer con respecto a Kahn y Buffon es que no sólo destaca por el carácter defensivo de su rol en el campo sino que también ha tenido importancia como parte del juego de ataque de su equipo.
Tampoco ha sido Neuer el primer portero con salidas llamativas, pero quizás sí el que las haga con un resultado que le ha dado más continuidad a la posesión efectiva de su equipo. Hablar de Neuer en el Bayern es hacerlo, literalemente, del primer atacante y del último defensor del equipo. Un activo sin el que tal vez sea más complicado explicar el sistema de juego que desarrolla actualmente su equipo. Sin él, el juego del Bayern no sería peor, pero sí diferente, distintas formas de empezar a jugar o de cerrar al equipo cuando por la acumulación de pases pueda desequilibrarse.
Por esto, la hipotética concesión del Balón de Oro a Neuer no vendría a decir que Cristiano Ronaldo o Messi sean jugadores menores, a no tener en cuenta un año donde han sido mejores que el resto, sino a premiar el impacto y cambio de rol dentro de un equipo de élite. Una pequeña evolución en una posición para los que muchos piensan que está todo inventado.
Escrito por Miquel UoDT
Ni 'analista', ni 'parabólico', ni 'especialista', ni 'experto', ni 'periodista'. Me gusta hablar de fútbol y ya está. Opino y comparto.