Las bolsas de trabajo son un instrumento que utilizan algunas empresas para contratar trabajadores. A veces se realizan procesos de selección no para optar a un determinado puesto, sino para formar parte de una de estas bolsas. Una vez que la empresa necesita contratar personal, llama directamente a los aspirantes que forman parte de la bolsa de empleo.
Originariamente las bolsas de empleo fueron creadas por universidades, en las que cada facultad creaba sus propios listados de ex alumnos, de forma que cuando una empresa recurría a ellos para buscar personal, tenían un listado de candidatos, actuando así como intermediarios.
Hoy en día este tipo de prácticas son frecuentes sobre todo en los empleos públicos (profesores, administrativos, sanitarios…), centros de formación, y algunas grandes empress. Cuando necesitan contratar personal por un tiempo determinado (suplencias) u ocupar plazas que han quedado libres.
Recomendaciones a tener en cuenta acerca de las bolsas de trabajo:
- No siempre se hacen públicas.
- Superar con éxito todas las pruebas y estar en la bolsa, no nos garantiza que nos vayan a llamar.
- Se suelen hacer diferentes pruebas para realizar un proceso de selección con todos los candidatos.
- Normalmente hay que adjuntar documentos compulsados a la solicitud, para que nuestros títulos y certificados estén verificados.
- Es conveniente realizar un seguimiento, aunque no suele ser posible.
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