Sé que tras leer el título de este post tu mente se estará preguntando qué narices tiene que ver el Social Media con Gandhi y que seguramente tu curiosidad te habrá hecho empezar a leer esto. Aunque no lo creas, Gandhi hubiese sido un gran blogger. ¿Sabes por qué? Porque nunca recomendaba algo que no hubiese hecho él mismo antes.
Veo que algunos bloggers están confundiendo el generar artículos de valor, con el escribir sobre cualquier tema relacionado con la temática de su blog y que han leído en cualquier otra página. Esto no es una crítica a esos bloggers, sólo es un consejo para esos compañeros. Yo también pasé por esa fase en la que las ideas fallan porque no encuentras la inspiración y acabas tirando de infografías para generar artículos. De hecho, muchas veces sigo publicando infografías, pero intentando validar su contenido con las experiencias que he tenido.
>> ¿Cómo aportar valor cuando ya no hay nada que aportar?
¿Te has dado cuenta de que prácticamente no hablo sobre ecommerce en el blog? Esto se debe a que no soy ningún experto en el tema. Si quieres aprender sobre ecommerce puedes leer a otros bloggers como Juan Macías que realmente dominan la materia.
La semana pasada me invitaron a participar en una mesa redonda de publicidad en un congreso. Rechacé la propuesta. ¿Por qué? Porque no podría aportar valor de un tema que no domino al 100%, así de sencillo. Una de mis premisas tanto con mi blog, como en el trabajo es hablar únicamente de lo que he probado, de lo que he vivido, con lo que me he peleado en mi día a día. ”Escribe acerca de algo que sepas” Juan José García Noblejas
>> Los Datos No Tienen Valor, Su Interpretación Sí
¿Cómo puedes hablar de generar engagement en Facebook si no eres capaz de lograrlo ni con tu propia página de fans? Ten en cuenta que el PTA te puede delatar. O por ejemplo ¿cómo puedes dar consejos sobre cómo gestionar una cuenta de Twitter si ni si quiera tú te aplicas esos consejos?
Pero no te preocupes, todo esto se soluciona de una forma: probando. La experiencia es lo que te da esa capacidad para escribir o hablar acerca de algo sin ningún miedo. Si puedes rebatir tus argumentos sobre lo que estás hablando no importa si estás en lo cierto o si lo que dices está equivocado, porque estará siempre basado en tu experiencia y esa será tu arma más potente.
Dicho todo esto te estarás preguntando dónde queda Gandhi aquí:
Cuenta la historia que una mujer llevó a su hijo ante Mahatma Gandhi porque comía demasiado azúcar, estaba muy preocupada por su salud y le era del todo imposible lograr que su hijo lo dejase. El hijo admiraba mucho a Gandhi y ella estaba convencida de que si él le aconsejaba que dejase de comer azúcar, ante el respeto que tenía por él dejaría de hacerlo.
Cuando lo tuvieron frente a frente la mujer le explicó a Gandhi el problema que tenía y le pidió que le aconsejase a su hijo dejar de comer azúcar. Gandhi la miró pensativo y le dijo “Tráigame a su hijo dentro de dos semanas”.
La mujer no entendía el porqué de aquello, pero así lo hizo. Pasadas las dos semanas le trajo de nuevo a su hijo y lo plantó delante de Gandhi. Éste miró al niño y le dijo “Hijo, deja de comer azúcar, es muy malo para la salud”. El niño aceptó encantado puesto que era Gandhi quien se lo pedía.
La madre se quedó perpleja y no acababa de comprender por qué le había hecho volver dos semanas después. ¿No le podía haber dicho eso mismo hace dos semanas? Muerta de curiosidad le preguntó a Gandhi y este le respondió “Señora, para poder recomendarle a su hijo que dejase de comer azúcar, primero tenía que dejar de comer azúcar yo mismo”.
Respect.