A primera vista, Ammán puede parecer una ciudad de tonos ocres, de colinas infinitas y tráfico intenso. Pero basta con adentrarse en sus calles para descubrir que es una capital viva, vibrante y llena de contrastes, donde la historia grecorromana convive con cafés contemporáneos, arte urbano y mercados llenos de aromas orientales. Voilà, el pasado y el presente se dan la mano en un ritmo fascinante. Ammán es el punto de partida perfecto de cualquier gran viaje por Jordania. Aquí comienza la historia antes de lanzarse hacia Jerash, Ajlun, Petra o el desierto de Wadi Rum. Es, literalmente, la puerta