En el supermercado se puede ver fácilmente a través de los colores o los diseños de los paquetes, cuales están hechos para llamar la atención de los niños que luego les pedirán a sus padres que se lo compren hasta conseguir su objetivo.También en la televisión se puede observar acciones que disimulan poco su tentativa de conquistar al público infantil y esto ha enfadado en Brasil, un país muy peculiar comercialmente hablando, ya que a pesar de su gran crecimiento económico está siendo muy restrictivo con la industria publicitaria. De hecho, en este país está la única ciudad sin publicidad: Sao Paulo. Podéis leer más en el siguiente enlace: São Paulo. Una ciudad sin publicidad.
La publicidad para los niños no es legal
Para ellos ha sido un gran logro ya que comparten la opinión de que: “La práctica de dirigir la publicidad y marketing a los niños con la intención de persuadirlos de consumir cualquier producto o servicio es injusto y por lo tanto ilegal según el Código de Protección del Consumidor”.Es cierto, que estas prácticas no son del todo correctas pero solo cuando se trata de persuadir y no cuando persiguen informar. Ya veréis estos niños cuando crezcan o salgan del país y se enfrenten al poder de la publicidad. Creo que serán incluso más vulnerables...Yo de hecho creo que la publicidad puede ser muy negativa para los niños pero bien utilizada puede también conseguir que un niño coma y se comporte de un modo más correcto. La cosa no está en prohibir sino en mejorar el reglamente y saber como dirigirse a este público.