La Asociación de Amigos del IV Centenario de la Plaza Mayor, la de Hosteleros de la Plaza Mayor y Madrid de los Austrias y el Gremi de Restauració de Barcelona se unieron así ante los fogones para maridar en un menú las especialidades de ambas comunidades. El escenario fue la terraza de Casa María, uno de los restaurantes que circundan esta plaza que, como señalan los organizadores de este acontecimiento culinario, fue “un escenario del poder, de la cultura urbana y de las luchas por la libertad que ayer se convirtió en escenario de concordia y diálogo en torno a una mesa”.
Entre los presentes mencionados y otros comensales, que superó las sesenta personas. Los asistentes compartieron una sopa de cocido y una escalibada de primero; un empedrado de garbanzos de Madrid con mongetes amb botifarra de segundo y, de postre, leche merengada y crema catalana. Si los políticos catalanes y madrileños del poder hubieran mantenido el ejemplo de este acontecimiento, siguiendo los pasos de los que intervinieron en “Quedem per comer” otro gallo hubiera cantado entonces.