Querido Ayuntamiento de Bilbao

Por Theblackcity @Theblackcity
Querido Ayuntamiento de Bilbao:

Te escribo aún a sabiendas de que no leerás este post. Qué leches vas a leer tú a una bilbaina con un blog sobre gastronomía de tu ciudad, que encima no hace más que quejarse de lo mal que va el wifi por todos lados. Pero te escribo a ti para quejarme de algo que hoy ya me ha sobre pasado, me quejo como cuando voy donde mis padres a despotricar de mis profesores de la universidad (me tienen manía, os lo juro), aun a sabiendas de que quedará en saco roto. O no. 

Ojalá vieras en qué se está convirtiendo Bilbao, ojalá pasearas por las calles y vieras que esos rincones de siempre ya no están, que en su lugar no hay mas que grandes empresas multinacionales que ni siquiera son de este continente, empresas que transforman Bilbao, tanto que algunas hasta joden las maravillosas fachadas de edificios emblemáticos, sin intención de convivir. Pero para qué nos vamos a quejar, ¿verdad? Total, traen dinero a la ciudad. O no. 

Ojalá vieras cómo una parte de la historia de Bilbao desaparece, cómo aquella pastelería minúscula sin posibilidad de que mi pequeño cerebro recuerde su nombre, pero sí sus gigantes pasteles de merengue de la calle Ercilla ya no está; cómo las señoras han cambiado el chocolate con churros de Hurtado Amézaga por un café gratis con la Ikea Family; como ya en este post me empezaba a hervir la sangre con el cierre de algunos locales. 

Hoy nos hemos levantado con la triste noticia de que tras 18 años, la Tahona de Sarriko cerrará el próximo 31 de diciembre, una pequeña empresa que formaba parte ya de esos comercios con encanto de Bilbao. Y encima me dicen que ese mismo día cerrará la taberna Taurina de Ledesma. ¿Ves? Ojalá vieras que el encanto y ese alma de las calles se está perdiendo. Sé que tú, como ayuntamiento no puedes directamente bajar los impuestos, no puedes hacer que obtengan ayudas con el alquiler de sus locales, no puedes hacer que sus impuestos y cuotas de autónomos les ahoguen hasta la asfixia, no puedes hacer nada. O sí. 

Y me estoy centrando en hostelería, pero hay una lista sin fin de comercios pequeñitos con solera con años de historia que ya han desaparecido, qué triste es ver un Tiger en la que fue una de las tiendas de moda referencia en Bilbao; que a generación de los que quedábamos para salir en Vellido no sepamos ni explicar a los que vienen qué era aquella tienda para nosotros; que el café Boulevard ha perdido su magia pasando por tantas manos; que cuando queríamos un vaquero Levi's nos pasábamos por For; y así otro tanto. ¡Si ha cerrado hasta el ascensor de Begoña! Ni qué decir, de aquellos que arrancan, por seguir dando aire al alma de Bilbao, pequeñas empresitas de mil y un sectores distintos que se las ven y las desean para cumplir años.

Una vez más, querido Ayuntamiento, ojalá vieras lo que pasa en nuestras calles, ojalá vieras que Bilbao no es sólo Gran vía, Athletic o Bilbao Basket. Ojalá vieras que los pequeños te necesitan mucho más, y tú a ellos, ya que esos pequeños son los que te dan vida, alma, los que hacen que Bilbao, sea mucho más que una ciudad con un bonito museo con forma de barco. Ojalá leas este articulo, y veas que los bilbaínos queremos seguir comiendo un pintxo de txangurro, unas trufas, un bocadillo de bonito con alegrías, un sandwich con salsa secreta, un marianito preparado o un zumo de tomate preparado para los que no beben, una hamburguesa en una banqueta… Y queremos probar cosas nuevas, sin oportunidad de que se vuelvan tradición por la maldita situación. 

Por aquellos autónomos, empresitas y demás valientes que hacen que Bilbao, siga en movimiento.