Y es que servidora podría alimentarse a base de queso. De cualquier tipo. Bueno no todos, los tranchettes entran en la categoría de plásticos varios, así que no los cuento. El caso es que si enumerara los quesos que devoro, creo que esta sería la entrada más larga forever and ever, y chica, no es plan. Esta mañana estaba yo en casa aburrida, y mira, me ha dado por hacerme un tabla de quesos, casualidad, los tres son franceses, aunque creo que para que fuesen perfectos, faltan otros tres indispensables para mi: Mimolette, Brie y por supuestisimo un buen Roquefort.
En la foto, Camembert, nada que ver con el Brie; Comté de 24 meses de curación (si os va la marcha, éste, sino tanto, probad el de 12 meses); y uno de leche de cabra cruda y algo de leche de oveja, de los Pirineos. Por supuesto, todo, con un buen pan, y permitidme que le haya quitado los frutos secos, mermeladas y demás condimentos, el prota, es el queso. Always.
Y a vosotros, ¿os gusta el queso? #SAYCHEESE.