Por José Andrés de Esesarte
Cada vez más apretado el camino; a pesar de la dura lesión de Wentz, la de Shazier la semana pasada y muchas otras bajas importantes, hay excelentes candidatos en la pelea por el MVP de la temporada. Fue una semana difícil para varios, sin embargo, muchos de ellos se mantienen sólidos en la contienda.
10.- A.J. Bouye – CB – Jaguars
(Posición anterior: NA)
Jalen Ramsey sin lugar a dudas llegó a tener un impacto fuerte en la liga, pero me encanta lo que ha hecho Bouye este año. Llegó a Jacksonville con un buen contrato y lo está exprimiendo en cada partido, es líder de intercepciones en la liga y demuestra a los QB que no hay un corner cómodo en el equipo a quién lanzarle. “21 reasons” diría PrimeTime.
9.- Bobby Wagner – ILB – Seahawks
(Posición anterior: NA)
Por qué no mencionar al mejor LB de la actualidad. Está en todos los snaps de su equipo y raramente falla una tacleada. Tiene de todo, intercepciones, sacks y safeties, y es que realmente puede hacer lo que sea necesario. No hay defensivo con esa concentración ni linebacker que mantenga un nivel tan constante en una temporada y tal vez no haya un defensivo que haya mantenido un nivel tan constante en más de cinco temporadas.
8.- Jared Goff – QB – Rams
(Posición anterior: 8)
Con lesiones en ambos lados del balón Goff ha sido capaz de seguir produciendo. Tienen los Rams su primera temporada ganadora en mucho tiempo y la gran oportunidad de ganar su división en casa de los Seahawks y con Goff sin duda pueden lograrlo. Su característica este año ha sido una gran cautela, pero sobre todo lanzar bombones a sus receptores y ejecutar espectacularmente el play action, fórmula que, de ayudarle su línea, resultará en su siguiente encuentro, mismo que haría más seria su candidatura.
7.- Philip Rivers – QB – Chargers
(Posición anterior: NA)
Cuánta adversidad han enfrentado los L.A. Chargers este año. Llegar a una ciudad que no los aclamaba, un estadio pequeño, el mal inicio, pero se han sobrepuesto a todo, y no hay mejor ejemplo para sobreponerse que Philip Rivers, bautizado como el Float Master por el Maestro Toño Sempere. A pesar de las intercepciones ridículas que tira a ratos y sus errores, su liderazgo y empuje mantuvo a este equipo en pie tras el duro inicio y hoy tienen una oportunidad inmejorable de ganar su división y acceder a postemporada en la mejor manera posible. Rivers podría estar teniendo su mejor temporada como profesional, ha bajado las entregas considerablemente además de lanzar cada vez con más precisión. También hay mencionar la efusividad que le da vida a un vestidor que se vio muerto en las primeras cuatro fechas.
6.- Todd Gurley – RB – Rams
(Posición anterior: 6)
No deja de gustarme el aporte de Gurley al equipo de los L.A. Rams. Tiene capacidades diferentes a las de muchos corredores de la NFL, una fuerza brutal pero una agilidad de dar miedo. Es Gurley el mejor jugador de su equipo y evoluciona mucho a pesar de estar apenas en su tercer año. Le dan el balón con suma frecuencia y su capacidad de producir es enorme, no me sorprendería si los Rams le dan una sorpresita a Seattle en el CenturyLink Field y Gurley es el mejor jugador del partido.
5.- Le’Veon Bell – RB – Steelers
(Posición anterior: 4)
Muchos no lo quieren aceptar pero no hay corredor más completo en la NFL. Tiene gran promedio de yardas por toque y puede hacerlo todo. Big Ben ha ido levantando su nivel en las últimas semanas llevándolo hasta donde todos esperábamos, pero no hay que dejar de considerar que tiene al líder corredor en su equipo. Ya es toda una costumbre en Pittsburgh que su corredor tenga más de mil yardas terrestres y más de 500 yardas recibidas, cosa que en franquicias como Denver sólo Knowshon Moreno ha logrado, en una ocasión y con Peyton Manning a su lado. No lo olviden, además de los QB, solamente los corredores han ganado el MVP y el mejor de la liga se llama Le’Veon Bell.
4.- Case Keenum – QB – Vikings
(Posición anterior: 7)
Keenum ha hecho de Minnesota lo que nadie esperaba, convertirse en una amenaza latente a ganar su conferencia. Si bien su defensa no le ayudó mucho esta semana, el exfinalista del Trofeo Heisman sale semana a semana haciendo lanzamientos que haría Tom Brady, Aaron Rodgers o algún QB elite. Le han soltado pases, ha cometido errores, pero a pesar de todo ha demostrado carácter y liderazgo además de una gran capacidad que esperaba la NFL de él desde hace años y que por fin estamos viendo.
3.- Antonio Brown – WR – Steelers
(Posición anterior: 5)
Nunca ha pasado, pero a pesar de ello, no me atrevería a descartarlo. Antonio Brown puede ser el MVP de la NFL y no sólo por ser líder en yardas vía recepción con una ventaja de más de 250 sobre el segundo lugar, sino porque está apareciendo semana a semana para darle a su equipo la recepción que les gane el partido. No hay duelo que sea imposible para él y sigue haciendo ver mal a excelentes corners en personal, dobles coberturas y por supuesto en marcaciones por zona. Hablan de las armas de los Steelers, pero Brown termina siendo el jugador que hace la diferencia.
2.- Tom Brady – QB – Patriots
(Posición anterior: 2)
Dicen que de cara a la postemporada hay que venir con la mejor racha, y es cierto, sin embargo, Tom Brady es un viejo lobo de mar y sus mejores actuaciones vienen después de sus ligeras bajas de juego. Viene de tres intercepciones y tan sólo un touchdown en los últimos dos partidos, pero a pesar de ello, Brady ha tenido una temporada bastante sólida y su calidad no está en tela de juicio. Sigue siendo un candidato muy fuerte para ganar su tercer MVP.
1.- Russell Wilson – QB – Seahawks
(Posición anterior: 5)
Hablan de la Legión del Boom, de Michael Bennett y de Bobby Wagner, sin embargo, cuando este equipo se ve más desmantelado y abrumado por las lesiones los carga el mismo hombre: Russell Wilson. No viene de un buen partido, incluso fue uno de los peores del año para él, sin embargo, su resiliencia durante los partidos y las temporadas además del impacto que genera en su equipo son dos argumentos muy sólidos para darle el reconocimiento al jugador más valioso de la temporada. Tiene liderazgo sin igual y compensa la falta de talento en muchas posiciones de la ofensiva.