Imagen de galleryhip.com
Parafraseando al querido Paziños de Airbag me he encontrado a mi misma buscando una rima para un mes con R, de esos que traen Centollos, en una burda manera de retomar el blog en plan aquí-no-ha-pasado-nada.Bueno, lo cierto es que sí ha pasado, y mucho, pues justo el mismo día que daba carpetazo a los exámenes de septiembre y me disponía a retomar mi actividad cosmético literaria habitual recibí una llamada que me cambió la vida: una oferta de empleo!!!
Por desgracia, como nada es para siempre esta oferta también tiene temprana fecha de caducidad, pero, como dice el chiste, lo que dura dura* y mientras dure habrá que disfrutarlo al máximo posible. Eso sí, os diré que tras 32 años de dique seco (sí, en el ínterin del estudio me cayó otro año más encima), la posibilidad de un trabajo remunerado y para el cual estoy cualificada ha sido una de las mayores alegrías, ilusiones y noticias esperanzadoras que he recibido en el último lustro.
Imagen de wifflegif.com
Por supuesto, como toda primeriza me he pasado los dos primeros meses sin dormir, sufriendo brotes agudos de dermatitis y, básicamente, respirando en una virtual bolsa de papel marrón a la espera de un inminente despido acompañado o no de denuncia judicial. Bueno, de momento, nada de esto ha pasado.
Así, el caso es que ya que me vuelvo a sentir un poco como la yo de antes me gustaría retomar esta bitácora antes de que la última de mis seguidoras decida que ocupo un inmerecido lugar en su lista de lectura de blogger. Ahora bien, no sé qué tipo de asiduidad podré garantizaros (por no hablar de la ya dudosa y friki calidad de mis entradas). Lo único que puedo prometer (y prometo) es seguir poniendo tanto cariño en cada palabra como hasta ahora.
Dicho esto, os deseo una feliz tarde de domingo y os mando un besazo muy muy fuerte desde mi isla digital particular.
* Si no lo conocéis me decís y ya os lo contaré por privado, porque es demasiado verde para contar en abierto.