Título: Quien pierde pagaAutor: Stephen KingEditorial: Plaza y Janés, 2016Páginas: 448.
SINOPSIS.
Unos leen para aprender, otros para olvidar.Y devoran el libro o el libro los devora a ellos.He aquí el plan de un lector maníaco.
«Despierta, genio».
Así comienza la fascinante nueva novela de Stephen King sobre un lector fanático. El genio es John Rothstein, un autor de culto, creador del personaje de Jimmy Gold. Morris Bellamy está fuera de sí, no solo porque Rothstein haya dejado de escribir, sino también porque considera que el inconformista Jimmy Gold se ha vendido para dedicarse a la publicidad. Morris decide matar a Rothstein y vacía su caja fuerte para llevarse no solo todo el dinero sino además el verdadero tesoro: los cuadernos de notas de otra novela protagonizada por Jimmy Gold.
Morris lo esconde todo y al día siguiente acaba en la cárcel por otro crimen terrorífico. Décadas más tarde un chico llamado Pete Saubers encuentra el tesoro y ahora son él y su familia a quienes han de salvar Bill Hodges, Holly Gibney y Jerome Robinson del vengativo y trastornado Morris cuando salga de la cárcel tras treinta y cinco años encerrado.IMPRESIÓN PERSONAL.
Hace unos años leía y reseñaba por primera vez un libro de Stephen King, Misery, un libro cuya trama incluía el estado psicológico extremo a que llega una lectora fan de un autor de tal modo que prácticamente lo mata, con tal de que siga escribiendo una serie de la que ella es adicta. Un libro que te pone literalmente los "pelos de punta" y si se ve además la película sobre el libro y pones "cara" a los personajes todavía la tensión se nota aún más.
La novela nos lleva a 1978, año en el que Morris asesina al autor de su serie favorita simplemente porque en las últimas entregas piensa que el autor ha llevado al personaje a traicionar sus principios convirtiéndolo en una persona del montón, un publicista. Le roba todos los cuadernos una vez que lo mata pero no tiene tiempo de leerlos antes de que lo detenga la policía por otro delito que ha cometido. Entre 1978 y 2010, Stephen King nos presenta de primera mano a los dos personajes protagonistas: Morris y Pete Saubers, un niño que encuentra un tesoro que salvará a su familia de la miseria durante más de una década pero que a la larga le va traer problemas de gran calibre. En esta primera parte, prácticamente sólo conoceremos la acción de estos dos personajes como una clara preparación para lo que vendrá. En ese sentido, la preparación es perfecta porque va incrementando la tensión de una forma sumamente inteligente de tal modo que te vas metiendo dentro de la problemática que ves que tarde o temprano va a ocurrir y que no sabes como va a terminar.
Un ritmo ágil, al estilo de King, unos personajes sólidos a los que acabas conociendo perfectamente por sus acciones mas que por descripciones eternas sobre su forma de ser, hace que te metas en la historia de principio a fin. Una segunda parte de una trilogía que merece la pena y que bajo mi punto de vista es aún mejor que la primera, y eso que ya me gustó muchísimo esta.
Sin duda, la recomiendo.