Una versión que han hecho circular los corresponsales en Caracas de ABC de España y la Voz de Galicia, que por su línea editorial se sabe que responden a la derecha y el capital, indica que el comando de campaña de Henrique Capriles ha denunciado que existe “un plan para asesinar a Capriles”.
Después de la errática declaración del candidato opositor para aceptar contender en las elecciones, la derecha venezolana está huérfana de un proyecto de país y su estrategia apunta a la descalificación del chavismo, e incluso a la supuesta mentira del fallecimiento del presidente Hugo Chávez Frías, entre otros fiascos.
Buscan la confrontación y la desestabilización del país. A esa estrategia le sirve desestimar, tirar a la basura, a un candidato que anuncia su derrota antes de comenzar la campaña electoral.
Sería a esta derecha fascista y golpista venezolana a quién beneficiaría el asesinato de Capriles. Según la propia versión de dichos periódicos hasta el gobierno de Venezuela está preocupado por la posibilidad de un asesinato.
En rueda de prensa para hablar de la organización del comando, su jefe, Henri Falcón, dijo: «recomendamos a nuestro candidato que no asistiera al Consejo Nacional Electoral; no estaban dadas las condiciones» porque tenía información de «fuentes fidedignas, incluso de organismos de seguridad del propio gobierno que se preparaba contra Capriles una emboscada en las inmediaciones o en las instalaciones del CNE».
Más allá de la verdadera razón que tuvo Capriles para no concurrir al CNE, resulta muy grave para el pueblo venezolano que ruede esta versión de un posible asesinato porque a quién más beneficiaría ese fatídico acontecimiento es a la propia derecha opositora y otros turbios intereses, que no tiene nada que ver con la transparencia demostrada por el chavismo.
Y, no es novedad esta intención de atentar contra Capriles de la extrema derecha. Cuando contendía frente a Hugo Chávez, hace apenas un año, fue denunciada la posibilidad de un asesinato para acusar al gobierno bolivariano.