La educación no funciona.
Es un hecho. No hay mucho debate sobre el tema. Habrá gente que lo achaque a una cosa y otros a otra. Pero, creo que la gran mayoría de padres del siglo XXI, estarán de acuerdo en que la educación no está funcionando. Y lo sabemos por nosotros mismos. Que fue de todo ese tiempo que perdimos repitiendo los ríos de España, o los verbos en inglés… Toda nuestra educación ha sido repetir y repetir. Hasta que nuestro cerebro lo podía recordar. Pero, no por mucho tiempo, con una semana nos valía. Una vez pasado el examen, tocaba olvidar. ¿Y, para que servía entonces? Por que ni siquiera hemos conseguido una memoria especial.
Yo soy una apasionada de la historia. Y cuando tengo dudas, intento entender como se ha llegado a esto. Se supone, que con el tiempo, las cosas mejoran, no van a peor. Pero, me encuentro con las escuelas pitagóricas, Socráticas, Platónicas… Las cuales comenzaron hace más de 2.000 años. Y estaban basadas en hacer pensar a los niños. Cuando estas escuelas desaparecieron (por presiones) la iglesia tomo el control de la educación. Y aunque no lo creamos, la asignatura más importante de la educación. La que primero se estudiaba, era la filosofía. Esa pequeña olvidada, a la que año tras año se le va relegando un puesto más atrás. Y que hoy en día, la gente no sabe ni que es ni para que sirve (dedicaré un artículo para hablar de la filosofía). La filosofía amigo mio, es tan solo pensar de forma coherente. Simple y llanamente. Enseña a cuestionar y razonar. Descubrir el mundo que nos rodea. No hay verdad absoluta.
Hoy en día que el pensamiento crítico está tan de moda. Parece
Esto no es nuevo y no creo que haya una sola persona, de dentro de los gobiernos como de fuera. Que piense que nuestro sistema educativo basado en la repetición funcione. Pero, ¿entonces por que no se cambia nada? Los fracasos son obvios. Y los cambios que podemos ver en las últimas décadas, han sido de la ciudadanía, de la religión, que si un examen de control antes o después… TONTERIAS. Todo el mundo lo sabe, pero no se hace.
Trabajando la creatividad del niño.
Niños que piensen por ellos mismos. Aun recuerdo a mi madre diciéndome que pensara por mi. Que no me dejara arrastrar por nadie. Tienes que tener tu propia personalidad, no te lleves por las modas… Pero, la creatividad no solo sirve para eso. Si no para solucionar problemas, para entender como funciona el mundo y lo más importante, saber discernir.
Por desgracia, no hay ninguna formula secreta para conseguir que los niños sean independientes y que tengan creatividad. Ya que la genética también tendrá mucho que decir. Vamos que no todos los niños son iguales. Pero, desde luego, es que nuestra ayuda puede hacer mucho por el niño. Nos hemos resignado, somos conscientes de que en el colegio poco van a aprender. Eso, si, les enseñarán a estarse sentaditos y lo pasarán bien con sus compañeros. Y lo más importante de todo, aunque no lo creamos. La autoridad de la maestra. Los profesores, tienen la razón, no se puede discutir. Lo que se explica en clase, no se puede debatir. No hay opción. Las cosas son como son y ya está. Todo está resuelto y bien atado. Todo se sabe. Con lo que el niño desde que llega al colegio. Entiende como funciona mejor que lo que nos creemos. Hagamos su resumen mental del colegio:
Definición del colegio por un niño (inventado): Un sitio, donde me tengo que estar quieto horas. Escuchar lo que dice la profesora, sin tener que cuestionarlo. Ya que me han dejado bien claro, que lo que me dicen en el colegio ya está más que demostrado y no hay más opción. Y si me distraigo o llevo la contraría (de forma crítica) se enfadarán conmigo y considerarán que soy mal estudiante. Y luego quieren que sea creativo.
El aburrimiento es creativo.
De hecho, en verdad, el colegio, si que trabaja algo la creatividad de los niños de infantil y de primaria. Y es a base del aburrimiento. Los niños pasan horas en clase, sentados sin nada más que hacer más que escuchar lo que les cuentan. Medio dormidos por que se han quedado viendo la televisión por la noche (Master Chef o cualquiera de esos programas tan educativos para niños.), cansados y sobre todo muy, muy aburridos.
Y el aburrimiento, tiene un efecto curioso en nuestro cerebro. Cuando nos sentimos aburridos, nuestro cerebro empieza a trabajar, tenemos que buscar una forma de acabar con ese hastío. Y amigo mio, hay surge creatividad a raudales. De hecho, uno de
La semana pasada le he comprado la plastilina nueva (relativamente) de Play Doh. Parece que se pueden hacer muchas cosas con ella. Y muy bonitas. Pero, no necesité más de 10 minutos para darme cuenta de como funciona la plastilina nueva. Con moldes. Tienes mil complementos que puedes comprar. Para poder hacer las figuritas. Ya que es tan blanda que es muy difícil de dar una forma concreta, si no es con moldes. La plastilina clásica, necesitaba más trabajo y tenía más posibilidades para los niños (haciéndolo solo con las manos). Hoy en día, metes la plastilina en un molde y ya tienes un helado o un perrito o… Para que trabajar, para que esforzarse.