Publicado: mayo 13, 2015 en Uncategorized
Etiquetas:Podemos
Ya han pasado un tiempo desde mi última entrada en este blog, pero aunque ganas de desahogar mi frustración con todo lo que ha ido pasando estos últimos días no me han faltado, la falta de tiempo y el cansancio me han tenido alejado del ordenador.
Como viene siendo habitual cada día se ha hecho público algun exceso fechoría, o injusticia del sistema y de toda esa podrida casta de parásitos que con sus actos y decisiones han ayudado a hundir este país y alargar esta devastadora crisis (estafa) económica y de valores: que si miembros de la trama Púnica (como el exhombre de confianza de Aguirre, Francisco Granados) ocultaron millones en paraísos fiscales, que si la justicia embarga sedes Convergencia como fianza por lucrase del expolio del Palau de la Música, cobros injustificados de los entonces diputados del PP Federico Trillo y Vicente Martínez-Pujalte de una empresa beneficiada por la concesión de parques eólicos en Castilla y León, que si el estado ha recuperado algo menos de un 5% del rescate bancario y será imposible recuperar la totalidad de la fortuna invertida, implicación del presidente de la diputación de Valencia en una trama de cobro de comisiones ilegales, amaño de contratos públicos para favorecer a la al sobrino de la acalorada alcaldesa de Valencia, que si la junta de Andalucía cedió contrato de explotación de la tristemente famosa mina de Aznalcollar a sus amiguetes, contrataciones millonarias de la comunidad de Madrid a empresas relacionadas con algunos de los varones del Partido Popular como el ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, etc, etc,etc...
Muchos escándalos que dejan en evidencia que algo falla en este país donde la política se ha convertido en el redil de pícaros y desvergonzados vividores, capaces en algunos casos de tener las santos cojones de querer justificar lo injustificable o de permitirse la desfachatez de intentar dar lecciones de moral. Y entre tanto anormal aparece el exjefe del Ejército del Aire, el general Eduardo González-Gallarza Morales, y no se le ocurre otra cosa que escribir un artículo en el que pide que se ilegalice la formación de Pablo Iglesias, Podemos.
Según el susodicho individuo, hijo del un antiguo ministro del franquismo: "...en este panorama electoral me preocupa mucho este partido que ha surgido no sé cómo y al que incomprensiblemente se le tolera concurrir a estas elecciones [...] cuando lo que habría que haber hecho es prohibírselo y no sé si incluso declararles fuera de la Ley".
En el mismo artículo publicado en el último número de la revista "Tierra, mar y aire" el general González-Gallarza da lo que entiende el que son los motivos para tan drástica medida: "...por declararse así mismo (sic): antisistema, en contra de la Constitución que nos hemos dado los españoles, en contra de la Bandera, del Himno Nacional, están dispuestos a suprimir la Semana Santa, a ceder la Catedral de Córdoba a los musulmanes y no sé cuántos desatinos más".
Y no contento, con sus incendiarias y antidemocráticas teorías y deseos, en las últimas líneas de su artículo también se puede leer: "...me estoy refiriendo naturalmente a 'Podemos' al que yo cambiaría la decimotercera consonante por la séptima y sería más correcto el nombre". La séptima consonante es la J, lo que quiere decir, que según propone este individuo, el nombre tendría que ser "Jodemos".
A la vista de lo expuesto me queda claro que si en algún momento he tenido alguna duda, de si debía seguir militando en Podemos, esto disipa dichas dudas y me reafirma en mi compromiso y deseo de seguir trabajando a favor de la regeneración democrática y de una sociedad más justa. Seguiré trabajando y luchando porque las personas primen por encima de los intereses del capital y la banca, y para intentar que se cumpla esta frase, que hace un tiempo pronunció ese zafio y botarate personajillo que para nuestra desgracia ocupa todavía la presidencia de nuestro gobierno: "¡Quiero que quien la haga la pague!"
MSNoferini