Para ser masón o masona, hay que desear serlo. A continuación, hay que llamar a las puertas de una Logia masónica, bien sea enviando un e-mail a su dirección o manifestándoselo a algún miembro del Taller. Decidirse a decirlo, a llamar, es el primer paso. Obviamente, antes uno ha leído, reflexionado, ha buscado, y cree reunir las condiciones requeridas, extremo que corresponderá decidir a la Logia a cuyas puertas se llama. El proceso de admisión que seguimos en mi Logia es el siguiente, articulado en cinco momentos o pasos:
1.- Entrevista previa: tiene lugar antes de comenzar el proceso de admisión propiamente dicho. El candidato o candidata a la iniciación mantiene un encuentro preliminar con un maestro masón del Taller. En dicha reunión hablan de todo lo que sea menester: preguntas, dudas, inquietudes, aclaraciones, etc, en torno a la Francmasonería, a la Obeciencia, a la Logia… Tras esto, la persona interesada puede darse un tiempo de reflexión, al final del cual opta por solicitar, o no, la admisión.
2.- Solicitud de admisión: si tras la reflexión el candidato o candidata decide, efectivamente, solicitar ser admitido en la Logia, se lo comunica al masón con el que mantuvo la entrevista preliminar. Seguidamente, la Logia le envía dos impresos, que ha de rellenar de su puño y letra:
a) solicitud de admisión,
b) noticia autobiográfica: documento en el que el candidato o candidata se presenta ante sus eventuales compañeros de Taller, contestando a diversas consideraciones en diferentes apartados de su vida personal, académica, laboral y social.
A la recepción de la antedicha documentación, la Logia se cerciora –mediante un proceso de duración variable- de que quien solicita ser recibido francmasón o francmasona no haya sido previamente rechazado por alguna otra Logia de la Obediencia. Tras esto:
3.- Aplomaciones: se llama así a tres entrevistas que, sobre diferentes ámbitos de su vida, personalidad y relaciones, mantendrá el candidato o candidata con tres diferentes maestros masones de la Logia a cuyas puertas ha llamado. La identidad de los entrevistadores no es conocida por el resto de miembros de la Logia, sólo por el Presidente (Venerable Maestro). El Taller se pone en contacto con el candidato o candidata, se acuerdan las fechas, horas y lugares para la celebración de estas aplomaciones y, finalmente, cada maestro entrevistador elabora un informe que, en día acordado, será leído en la reunión (Tenida) de la Logia para, a continuación, efectuar una votación sobre la eventual admisión del candidato o candidata a la iniciación masónica. A continuación, se vota. Si la votación resulta positiva, se informa más tarde a los solicitantes.
4.- Pase bajo venda: se cita al candidato o candidata cuya admisión fue aprobada, se le conduce a los locales de la Logia y, con los ojos vendados para garantizar su propia libertad y discreción, se le introduce en el Templo. Allí, todo hermano o hermana del Taller que así lo desee puede interrogarle acerca de diversos temas de importancia para su eventual vida masónica. Acabado el interrogatorio, la Logia vuelve a votar sobre la admisión de la persona en cuestión. Si la votación resulta positiva, se informa a los solicitantes y se les convoca para ser recibido masón o masona.
5.- Recepción o Iniciación.
Este es el procedimiento que seguimos en mi Taller, en conformidad con lo dispuesto en el Gran Oriente de Francia.
He tratado de exponer exclusivamente los pasos, sin especificar las condiciones requeridas en los candidatos o candidatas que solicitan el ingreso en francmasonería, lo que ha sido objeto de otros post del blog.