Qumran 2010 Rosado

Por Orlando

Uva: 100 % Tempranillo.
Bodega: Bodegas y Viñedos del Qumrán.
DO Ribera del Duero
Precio: 5 €

ELECCIÓN DE: Antonio Rubio, enólogo.

Hace ya un año que descubrí este vino que hoy os propongo, pero no ha sido hasta ahora cuando he creído oportuno recomendarlo. Primero, porque quería comprobar que el vino que probé no era producto de un buen año y sí de unas buenas prácticas vitivinícolas y segundo, porque he estado esperando a la época estival cuando creo más oportuno su disfrute.

Viñedos del Qumran toma su nombre de los manuscritos hebreos encontrados en 1947 cerca del Mar Muerto por las tribus beduinas repartidos en 11 cuevas y que hacían referencia al protocolo de los vinos de Siria. No es que exista una relación directa de la bodega con los mismos, sino la pasión de su propietario, Jesús Solís, por la historia.
Se trata de un proyecto reciente, donde han unido la arquitectura y tecnología más vanguardista a las 4,5 Ha de la variedad tempranillo en plena Milla de Oro de Ribera del Duero. Excelentes sus robles y crianzas, os he querido presentar el vino que muy poca gente conoce, ya que con una producción muy escasa, prácticamente todo está vendido en Alemania (son contados los sitios donde encontrarlo en España).
¿Y por qué he elegido este vino? Porque sigo con mi pequeña cruzada donde demostrar que el vino rosado no es un vino menor, un 2º plato de un buen tinto y que si se elabora bien y a conciencia puede satisfacer los paladares más exquisitos. Sé de buena tinta que ha causado sensación entre mis compañeros de cata.

Elaborado a partir de los sangrados de los depósitos de mosto tinto tras 24 horas de maceración (así consiguen también el objetivo de concentrar los tintos elaborados) de uva tempranillo proveniente de sus viñedos, este vino se fermenta a baja temperatura con el objetivo de preservar la máxima cantidad de aromas.
El vino se muestra de un precioso color rosado oscuro, donde la nariz está armoniosamente dominada por aromas de fruta roja muy madura perfectamente conjuntada con otros más propias de la levadura como la panadería. Notas cítricas también destacan en su fase olfativa.
En boca es muy goloso, recordando la sensación de morder fresas. Perfectamente equilibrado con la acidez, el vino presenta una concentración de fruta y una estructura más propia de un vino tinto. Largo y de exquisito final, se trata de uno de los mejores rosados que han pasado por mi copa. Una pena que no haya más vino porque estoy convencido que se convertiría en el rosado de cabecera de mis noches de verano.
90 puntos. Ideal para carnes blancas y pastas con salsas de tomate. Démosle otra oportunidad al rosado!

OPINIÓN Y CATA DE: Ángel Layos, sumiller, ganador del Concurso por Parejas Vila Viniteca 2011.

Cuando la elegancia se viste de rosa, se llama Qumran. En este juego de menos de 12 € es muy posible que entren la mayoría de los vinos rosados de este país, ya que no suelen ser muy caros, pero…  bajo mi punto de vista deberíamos de tenerlos más presentes ya que los tenemos un poco en el olvido.

Dice la leyenda que Qumran nació de unas prensas como vino de “enjuague”, lavar la boca en las catas de tintos de la bodega, pero hacia las delicias de más de uno y por eso se decidió embotellarlo.
De la D.O. Ribera de Duero, Qumran 2010 es 100% Tinta del País. Viene presentado en la típica botella transparente de vino rosado con una etiqueta negra donde se puede apreciar  un dibujo que representa la bodega; todo es bastante al uso en su exterior pero lo que nos interesa está en el interior.

Rosado subido de color, sin ser una súper concentración como los rosados de golosina que parecen ojos de gallo, Qumran es la mezcla perfecta entre la parte moderna y la clásica del vino rosado; la nariz presenta frutas rojas frescas y golosas en sintonía, fresas, grosellas y alguna nota láctica de panadería que recuerda a las galletas María.
La boca es igual de elegante que la nariz, conjugando las notas frescas de la fruta con una buena acidez y ese regusto de galletitas que lo hace verdaderamente asombroso.
A maridar con pasta rellena de ricota en salsa carbonara.
Mi puntuación 9.1

OPINIÓN Y CATA DE: Carlos E. López, Catador y Socio Fundador de la Asociación Grupo de Cata BACO VIVE.

Bodegas y Viñedos Qumrán inician su andadura en el año 2006 después de que construyeran una espectacular bodega en Padilla de Duero, localidad situada a pocos kilómetros de Peñafiel, justo en la afamada zona vinícola denominada, por su calidad, “la milla de oro” de la Ribera del Duero, en donde cuentan con 14 hectáreas de viñedo.
Qumrán es sin duda un nombre sonoro y curioso y su vino rosado hace honor a este nombre en sus excelentes cualidades.
La enóloga de la bodega, Mónica Peñas, ha sabido interpretar perfectamente la Tinta del País, nombre con que se conoce a la Tempranillo en aquellos lares, y elaborar un vino rosado de los que pueden ponerse como ejemplo de cómo un vino de este tipo es capaz de conseguir los predicamentos necesarios para seducir y convencer a los que disfrutan con la expresión más frutal del vino; pero sin renunciar al carácter y la consistencia de un vino tinto.
De hecho, la coloración de este vino está más cercana a la de un vino tinto de capa baja que a los habituales vinos rosados de corte moderno que, en muchos casos, tienen tonos fresas muy subidos de color.
Ya en otras ocasiones desde este mismo foro, hemos querido lanzar una llamada de atención sobre la gran calidad de nuestros vinos rosados, e intentar hacer olvidar el obsoleto criterio que antaño tenían al respecto de que eran vinos de segunda. Nada más lejos de la realidad en estos momentos y el vino que hoy viene a nuestra mesa de cata, lo demuestra con plena solvencia.
Realizados con la mejor selección de mostos, con extraordinarios cuidados y utilizando los medios técnicos más avanzados, los vinos rosados de ahora son una auténtica gozada para todos los momentos del año, pero muy especialmente ahora, en época de verano, cuando los calores nos hacen disfrutar más de las bebidas frías, temperatura que en ningún caso merma el sabor y calidad de estos vinos.

Pero vayamos al grano y dejarme que os cuente que es lo que Qumrán rosado 2010 me ha parecido en cata:
Fase visual: Tiene un color rojo guinda de capa baja, con buena intensidad, limpio y brillante y que, en las zonas de menos volumen del vino en la copa, adquiere tonos anaranjados y cobres.
Fase olfativa: Es de buena intensidad aromática, limpio y muy afrutado. Muy varietal, con recuerdos de fruta roja en sazón (fresas y frambuesas), toques cremosos, vinosos y una clara influencia de las lías que intervinieron en su crianza.
Fase gustativa: En boca es un vino lleno de equilibrio, con buena entrada, sabroso, de buena intensidad, tan afrutado como en nariz, con toques de mentol y balsámicos, vinoso, con una golosidad comedida que en unión a su buena estructura y a un discreto amargor da gran trascendencia a su paso por boca. Su acidez es correcta, más que suficiente para dar frescura al conjunto y su final de boca es de buena persistencia y grato recuerdo.

Es, en resumen, un vino que tiene grandes cualidades en todas las fases de la cata y que tiene, tanto en nariz como en boca, un estupendo carácter frutal, pero que, además es absolutamente coherente en cuanto a lo que su apariencia visual nos sugiere, ya que su capa alta (para un rosado) tiene mucho que ver con su presencia en boca que resulta equilibradamente intensa y sabrosa.
Mi valoración: 8,4

OPINIÓN Y CATA DE: Luz Divina Merchán, Enóloga y Sumiller, Responsable de QueLujo Gastronomía y Vinos.

 En esta ocasión el vino que nos servimos en la copa era un rosado traído por nuestro amigo Antonio Rubio.
Tengo que decir que nos llamó la atención a todos los que formamos parte de 3 COPAS 1 VINO desde el principio, por su atractivo color, sus aromas tan deliciosos que te inducían a querer probarlo, y luego por la agradable textura, untuosa, golosa y apetecible. Inmediatamente lo anoté en mi lista de vinos para recomendar.

Al destaparlo, comprobamos que era un Vino rosado perteneciente a la Denominación de Origen Ribera del Duero, Qumrán, de bodegas y Viñedos Qumrán.
La botella, de tipo Burdeos, destaca por la etiqueta con diseño del alzado de la bodega. De las etiquetas más elegantes que he visto en rosados. Pero lo que me llamó más la atención fue el nombre, su etimología, por lo que investigué:
“… Qumrán es el nombre árabe contemporáneo dado a unas ruinas, donde habría habitado una comunidad de la congregación judía, muy cerca del mar muerto. Cerca de estas ruinas, se han hallado un conjunto de cuevas donde se han descubierto importantes manuscritos sobre la historia, tesis, estatutos y reglamentos de las comunidades que vivieron allí, junto a las versiones de libros de la Biblia, en hebreo y arameo, más antiguas que se conocen.
En estos principios de poblaciones vivas y definidas, ya, tenía mucha importancia en todo lo cotidiano, y especial significado en las celebraciones festivas. El vino formaba parte de cualquier acto relevante….”

Corcho limpio, de conglomerado, con el Nombre del vino
Vino de la añada 2010, la cual ha sido calificada como excelente prácticamente en todo el territorio español.
Vendimia manual, transporte en cajas de 20 kg., mesa de selección, son algunos de los pasos a seguir para que la uva llegue con la mayor calidad posible a los depósitos de fermentación donde el mosto dará lugar al vino.
Es un vino de una tonalidad rojo satinado, con mucho brillo, me recuerda al color pinta labios de verano, brillante con lágrima, densa y que cae lentamente.
En nariz, aromas limpios, intensidad media aromática, aromas a fruta tropical tipo guayaba, albaricoque, mentolados, frutillas silvestres que con el tiempo dejan paso a aromas de caramelo de las ferias, ese con el que cubren las manzanas. Mantequilla y algo de regaliz rojo.
En boca, entrada golosa, graso, untuoso, se percibe bastante el alcohol, ardiente, un final mentolado que abre las vías respiratorias, recuerdos de intensidad media a fruta, con cierta persistencia.

Después de catarlo para Viajeros del Vino, lo volví a hacer un mes después, y, no sé si es por catarlo en un lugar cálido y húmedo (Riviera Maya) pero mi percepción de la segunda cata fue de un punto alcohólico que sobrepasa mi umbral máximo (la Temperatura de servicio era la adecuada).

Qumrán es un vino rosado especial para este verano, para barbacoas, en un cóctel. Es el perfecto sustituto del vino tinto para las personas a las que no les apetece éste último por las altas temperaturas a las que nos encontramos.
Yo me lo llevé una de las botellas a mi viaje a México y lo tomé con cocina mexicana y fasciné.
Aprovecho este espacio para animar a la bodega a que no solamente este vino se vaya al mercado de exportación, sino que se quede también en casa .
Es una pena que exista este tipo de vino pero que luego los consumidores no podamos a optar a él para disfrutarlo.
NOTA: 8,7

 Nota de Editor: Cuando me llegó la elección de Qumrán Rosado 2010 y me puse en contacto con la bodega, su responsable, Jesús Solís, me comentó:  <<El rosado es un vino del que sólo hacemos 3000 botellas y prácticamente todo sale a Europa, Alemania y Holanda, principalmente>>. Y desde Viajeros del Vino le insistimos en poder catar y hablar de este magnífico rosado, porque, aunque esta añada no la podamos encontrar en nuestro país, es una muestra clara y evidente de cómo trabaja esta bodega, un apunte muy interesante y esclarecedor de la línea de Bodegas y Viñedos Qumrán, de la elaboración de sus robles y sus crianzas.
La calidad de este rosado hará que en sucesivas cosechas se vea incrementado el número de botellas que elaboren; y sin duda alguna, son una invitación clara a conocer y disfrutar de sus tintos.