Hauche festeja el gol de la victoria de Racing
Los encuentros amistosos de pretemporada en el fútbol argentino suelen ofrecer panoramas chatos y de poco vuelo futbolístico. La noche marplatense se convirtió en un nuevo testigo de esto tras la pobre victoria de Racing sobre Independiente por 1-0, que le permitió a la Academia adjudicarse la Copa Provincia de Buenos Aires.
Ningún equipo desplegó el nivel esperado por la mayoría de sus respectivos hinchas. Independiente intentó basar sus ofensivas en los pies de Patricio Rodríguez y Matías Defederico, quien evidenció pizcas de su habilidad en ciertos pasajes del primer tiempo. Empero, la intermitencia que afecta al ex jugador de Huracán y Corinthians desde que viste la camiseta roja impidió que su actuación resalte por completo. Además, las flojas actuaciones de Fernando Godoy, Osmar Ferreyra y Hernán Fredes, entre otros, colaboraron con el resultado final.
Asimismo, los hombres dirigidos por Alfio Basile (quien hoy no estuvo presente ya que se sometió a una operación de la garganta) dependieron exclusivamente de la magia de Giovanni Moreno. En los momentos en los que el creativo colombiano entró en confianza con el balón, la cara de su equipo cambió de manera asombrosa. Eventualmente, la apertura del marcador arribó por intermedio de una perfecta asistencia de Gio, quien sirvió un balón para que Gabriel Hauche defina cruzado y potente ante la salida del buen arquero Adrián Gabbarini.
Acompañando al enlace, también se destacó la presencia de un Agustín Pelletieri que ya desde hace mucho tiempo resalta entre los mediocampistas centrales del medio local por su recuperación incisiva, visión y claridad de juego.
El festejo racinguista se erigió como la mecha que provocó otro conflicto en relación a Teófilo Gutiérrez. El polémico delantero aprovechó la situación de alegría de sus compañeros para increpar a Gabriel Milito. Esta situación desequilibró al experimentado zaguero, quien minutos después recibió la tarjeta roja por parte del árbitro Sergio Pezzotta. Así, la escuadra del técnico riojano disminuyó aún más sus chances de empatar el duelo y así forzar la definición por penales para quedarse con el trofeo veraniego.
Incluso con la posterior exclusión del autor del festejo de la noche, Independiente no se acercó a la paridad -más allá de un cabezazo del ingresado Galeano que se estrelló en el caño de la valla de Sebastián Saja-, siendo esto una prueba clara de la mala jornada del Diablo, que finalizó el compromiso con nueve futbolistas gracias a la salida de Godoy.
Tanto el conjunto rojo como el académico deberán pulir detalles si es que desean cumplir con sus expectativas de cara a este semestre. Racing cuenta con Giovanni Moreno, base de la cual puede construir un futuro esperanzador, siempre y cuando sea abastecido con socios potables. En cambio, Independiente parece sumergido en una confusión futbolística peligrosa, de la cual tendrá que salir a base de autocrítica y una identidad de juego definida.