Radiofrecuencia facial

A día de hoy son muchas las intervenciones que tienen como único objetivo mejorar la estética, una situación que responde a la preocupación actual de la población por lucir una imagen óptima. Es momento de conocer las características y beneficios de la Radiofrecuencia facial, un sencillo proceso que tiene como principal objetivo mejorar la el aspecto de la piel de nuestro rostro sin que sea necesario la aplicación de inyecciones o la intervención quirúrgica. Por otra parte hay que destacar que a través de este proceso no solamente conseguiremos mejorar el aspecto de nuestro cutis puesto que incluye otros interesantes beneficios como por ejemplo la disminución de las arrugas o el adelgazamiento facial, siendo estas otras de las razones por las cuales estamos ante un método que cuenta con un gran reclamo en la actualidad.

Dicho de otra forma podemos definir la radiofrecuencia facial como una interesante modalidad de lifting (sin cirugía) que nos permite reducir las líneas de expresión así como la flacidez aumentado la robustez de la piel.

Como ya hemos avanzado anteriormente estamos ante un método muy demandado en la actualidad y es que hay que tener en cuenta que a medida que envejecemos disminuye la cantidad de colágeno que fabrica nuestro organismo y esta situación se refleja en un envejecimiento de la piel, siendo la Radiofrecuencia facial una de las alternativas más recomendables y sencillas a la hora de luchar contra este tipo de efectos, que afectarán en mayor o menor medida teniendo en cuenta el estilo de vida de cada persona.

De igual forma que sucede con cualquier intervención relacionada con la estética son muchas las personas que desean obtener información acerca de este tratamiento, por ello es momento de hablar de las particularidades de este proceso y una de ellas es que no solamente se puede utilizar en la cara si no que también nos será muy beneficioso en otras zonas del cuerpo. Por otra parte este proceso utiliza la radiofrecuencia bipolar y tripolar con la finalidad de calentar el tejido dérmico subcutáneo mediante ondas de radiofrecuencia, gracias a ello conseguiremos la contracción de las fibras de colágeno y promoviendo la fabricación natural del propio colágeno. Debido a ello conseguiremos que nuestra piel sea más firme y luzca un mejor aspecto. Finalmente hay que abarcar una pregunta muy común entre aquellas personas que desean someterse a esta intervención: ¿Es la radiofrecuencia facial dolorosa? No, estamos ante un método indoloro y relativamente rápido puesto que las sesiones únicamente tienen una duración que oscila entre los 20 y 60 minutos.

Después de conocer tanto el concepto como el proceso de la radiofrecuencia facial es momento de hacer un listado con los beneficios que nos propone y que podemos resumir diciendo que nos permite lucir una piel más joven evitando los signos de vejez en nuestro rostro. Es momento de conocer los beneficios particulares de este proceso. Son los siguientes:

Mejora del tono de nuestra piel
Endurecer la piel que se encuentra alrededor de la papada y cuello (reducción de la papada)
Alisado y endurecimiento de la piel facial
Ideal para levantar las cejas

Tal y como hemos podido ver estamos ante uno de los procesos estéticos que cuentan con un mayor número de beneficios, de igual forma se trata de una intervención muy sencilla e indolora que la convierte en una de las opciones estéticas que cuentan con un mayor reclamo en la actualidad así como se espera que esta tendencia continúa al alza si tenemos en cuenta la preocupación actual por lucir un cutis juvenil y saludable.

¿Preparado para disfrutar de las ventajas de la Radiofrecuencia facial?