Rogelio Alonso era un universitario español que llegó a Belfast a finales del siglo pasado y que se convirtió enseguida en profesor de la Universidad del Ulster, especialista en el terrorismo del IRA.
Conviene esta presentación sobre quien conoció el problema norirlandés mejor que muchos de sus colegas irlandeses o británicos y que ahora, además de profesor universitario en España, es uno de los consultores internacionales más respetados sobre los distintos terrorismos, incluyendo el de ETA, y sobre su impacto político y social.
Alonso acaba de advertir en una “Tercera de ABC” que Mariano Rajoy está cayendo aceleradamente en la estimación de los españoles, de manera que ahora ya no tendría su mayoría absoluta.
Y no señala que sea por sus duras medidas económicas, sino por la indignación provocada por su medrosa actitud con ETA y sus apoyos políticos, un nuevo apaciguamiento al estilo de Zapatero.
Rajoy acusaba al exprimer ministro de cobarde con ETA, y ahora hace igual, sigue su “proceso de paz”, lo que le hace perder simpatizantes a chorros.
Mariano Rajoy continúa con ETA la obra de quien dejó al país en la ruina económica y moral, sin autoestima, creyendo que no tiene futuro.
La entrega a ETA de la iniciativa sobre los presos, a pesar del fracaso de la política de reinserción, es un golpe la credibilidad de quien había prometido ser estricto en el cumplimiento de las leyes antiterroristas.
La doblez gubernamental al proclamar un triunfo sobre ETA en el que casi nadie cree, y plegarse al concederle innecesaria e injustamente el tercer grado a uno de sus asesinos más fieros y sádicos, igual que hicieron Zapatero-Rubalcaba con De Juana-Chaos, se ve como una alarmante traición a los ciudadanos sobre la que alerta la autoridad de Alonso.
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SALAS