No, ya no lo es. Así de duro y contundente. Más allá de sus ideas políticas y de sus decisiones , algunas compartidas y muchas otras no, yo siempre he considerado que Rajoy era mi presidente: El presidente del gobierno que legítimamente han escogido los ciudadanos de mi país.
Pero un presidente que no da la cara ante la decisión más grave a la que nos vemos sometidos todos los españoles. Un presidente que tiene la capacidad de nombrar y destituir a este ministro De Guindos que nos ha puesto por delante para explicarnos lo que ha negociado en Europa por todos nosotros, un presidente que nombra a un ministro de Industria que ha negado la mayor hasta hace unas horas y un presidente que parece se irá a ver el fútbol a Polonia...no quiero que sea mi presidente. No señor.
Si hubiera dado la cara a lo mejor tendría las mismas dudas que me ha dejado su ministro sobre "el préstamo blando" y "favorable" de cifras desconocidas, pero ya veis que tontería pensaría que aún tenemos un gobierno con "cabeza" en este país. Qué error político y moral tan imperdonable el de Rajoy que no me lo ha querido explicar a mí ni al conjunto de españoles, por eso yo paso también de él.