Un insulto para que todos los que les han votado de buena fe, para que se den cuenta de la doble vara de medir, de la doble moral de esta gente y de cómo se las gastan. Y centrándonos en lo más cercano y en las explicaciones que Ramón Espinar ha dado he de decir que tiene la cara de cemento armado, porque su historia no se la cree nadie. Dice Ramón Espinar que compró la vivienda de protección oficial con 19 años y que sus padres le ayudaron con 60.000 euros. Algo que él ve normal para un joven de esa edad. Sr. Espinar, no conozco a ningún joven en esas circunstancias… Y también es normal que una entidad bancaria dé una hipoteca a un joven de 19 años cuyos ingresos son de 400 euros al mes de una beca, que digo yo que cómo le dieron una beca con el patrimonio de sus padres, como mínimo de 60.000 euros…
Un insulto para que todos los que les han votado de buena fe, para que se den cuenta de la doble vara de medir, de la doble moral de esta gente y de cómo se las gastan. Y centrándonos en lo más cercano y en las explicaciones que Ramón Espinar ha dado he de decir que tiene la cara de cemento armado, porque su historia no se la cree nadie. Dice Ramón Espinar que compró la vivienda de protección oficial con 19 años y que sus padres le ayudaron con 60.000 euros. Algo que él ve normal para un joven de esa edad. Sr. Espinar, no conozco a ningún joven en esas circunstancias… Y también es normal que una entidad bancaria dé una hipoteca a un joven de 19 años cuyos ingresos son de 400 euros al mes de una beca, que digo yo que cómo le dieron una beca con el patrimonio de sus padres, como mínimo de 60.000 euros…