EL BOMBAZO: CONKER’S BAD FUR DAY.
Pues sí, ese símbolo que tenemos encima supuso un Mazazo espectacular para Conker’s Bad Fur Day. Mientras que en España seguíamos recibiendo imágenes del juego y tremendas dudas acerca de su lanzamiento, nos llegaban noticias de que en EEUU ya había sido puesto a la venta con resultados nefastos por la dichosa clasificación por edades, que lo consideró un juego para mayores de 17 años, es decir: Mature. Al otro lado del atlántico son mas rigurosos con esos temas que por estos lares por lo que se restringió el acceso al producto a la mayoría de compradores potenciales.
Viendo los desastrosos resultados económicos mas allá del charco, supongo que Nintendo América llamó a su sede europea avisando del descalabro y poniendo en duda el beneficio como distribuidor que tendría la compañía.
Al final la noticia se hacía efectiva y los usuarios europeos nos quedábamos sin la etílica ardilla si nadie hacia algo por evitarlo. Por suerte, ese alguien apareció. Se llamaba THQ y decidió tirarse a la piscina con la distribución del juego en Europa. ¿Europa entera? No, efectivamente. España no. Pero eso ya es otra historia.
Reconozco que me estaba tirando de los pelos, uno de los juegos mas esperados que tenía en la agenda, por el que llevaba muchos años babeando (desde aquel “Twelve tales”) no llegaba a España. Era imposible, yo no quería quedarme sin disfrutar de esa verborrea y esas burradas, tenía que hacerme con él fuera como fuera. Pues bien, la oportunidad se me presentó en forma de viaje a Paris con la familia (Como ya habré contado mas de una vez, pero es que estoy orgulloso de aquel viaje) en la que sin dudarlo ni un instante, empujé a mi madre hasta la Fnac de los Campos Elíseos con un único objetivo. Por supuesto salí con él. Supongo que mi madre advirtió que mi entusiasmo era real y no formaba parte de esos entusiasmos repentinos que tienen los chavales por X cosa en X momento.
Pero bueno, dejémonos de batallitas y vayamos al juego en sí, que tiene bastante que decir.
Después de todas mis peripecias llegué por fin a Santander y llegó el momento de insertar el cartucho y darle al ON. Posiblemente solo los créditos decían mucho mas que cualquier crítica escrita o verbal ya que nos encontramos a Conker con una sierra mecánica cortando en dos el símbolo de la Nintendo 64, despreciándolo con un sonoro “Stupid logo!” y sacándose del bolsillo su amada R dorada. Dudo que a Nintendo le gustase. La primera escena animada, nos sitúa a Conker, con una tajada considerable, entrando en un bar, el “The Cock and the Plucker” en el que vemos colgada como trofeo la cabeza de Banjo…esto no es normal.
Como resumen inicial se puede decir que Conker’s Bad Fur Day es un juego de homenajes. Homenajes al mundo del cine, los videojuegos, la cultura popular y sobretodo un auto homenaje de los chicos de Rare, que viendo este juego dan la sensación de quitarse el corsé y dar rienda suelta a sus gustos mas primitivos y chabacanos, con una libertad digna de esos pocos estudios que se la merecen.
Y entre homenajes varios, disfrutamos del clásico estilo de juego de Rare, por lo que nos encontramos con un juego muy potente jugablemente hablando. Sumando la resabida jugabilidad de Banjo o Donkey con inspiradísimos momentos cinematográficos basados en famosas películas que le dan ese toque mágico.
El genial y esperpéntico argumento toma una relevancia mucho mas acusada que en las demás aventuras de los ingleses, convirtiéndose en el motor del juego mas que en una excusa jugable. El juego, como muchas películas, comienza por el final y nos presenta a un Conker en una posición de poder, sentado en un trono, rodeado de personajes y bebiendo un rico vaso de leche. Él es el que se encarga de contarnos su historia, la historia de ese peliagudo día de resaca en el que se embarcó en un extraordinario viaje.
El argumento a grandes rasgos sitúa a Conker bebiendo en un bar y haciendo la típica llamada a su novía, avisándola de que la noche se alargará “ligeramente”. Por otro lado tenemos a un rey al que se le ha roto un preciado objeto y cree que una Ardilla funcionaría como el arreglo correcto a dicho problema. Tremendo.
Como siempre, voy a empezar por los gráficos, que ya se antojan como un elemento sin importancia al tratarse de un juego de Rare, sabiendo que van a ser fantásticos y obviándolos por ello. Como ya os he dicho mientras hablábamos de Banjo Tooie, los gráficos de Conker suponen la culminación del potencial de Nintendo 64. Son superiores a todo lo visto tanto anterior como posteriormente y pese a que en aspectos puntuales puedes sacarle punta a algunas cosas (valga la redundancia) no hay NINGÚN juego que haya conseguido una cohesión tan perfecta a máximo rendimiento de todos los aspectos técnicos del bicho de Nintendo.
Se podría decir que lo tiene todo. Desde el mas mínimo detalle hasta la visión mas amplia son una maravilla. Miles de texturas a una resolución fantástica, gran cantidad de polígonos en cada cosa plasmada, personajes increíblemente detallados, expresiones faciales a otro nivel, animaciones por doquier, escenarios repletos de luz, detalle, definición, colores vivos, entornos originales, efectos climáticos y un larguísimo etc. Podríamos estar mucho tiempo alabando el increíble aspecto gráfico de Conker, pero nada como verlo en movimiento. En cualquier caso, como viene siendo habitual, resaltaré el apartado negativo (que representa el 0.1% de la magnificencia gráfica) que es el uso reiterado de objetos en 2d, mucho mas marcado que en otros juegos de Rare y supongo que utilizados para dotar de mayor detalle algunos elementos que en 3D no podrían realizarse, véase sangre, abejas etc. El problema es que a pesar de ofrecer mayor detalle en elementos pequeños no dejan de verse como parches en ese entorno tan bello.
En el tema de los controles, estos se han simplificado con respecto a anteriores juegos de Rare, hasta el punto de adoptar un manejo mas cercano a Zelda, con su Botón multitarea, que a los complejos mecanismos de Banjo. Es lo que en Conker’s Bad Fur Day se llama “Context Sensitive” y que nos sirve para hacer diferentes movimientos específicos de cada momento del juego, que no usaremos mas y que ayudan a crear situaciones mas variadas y a no cargar el mando de comandos enrevesados. Esto se entiende bien con lo que os comentaba antes de que éste es un juego de momentos y el “contexto” es diferente en cada uno de ellos. Con este botón de contexto puedes desde “hacer un pis” hasta calzarte un traje espacial. Eso sí, siempre en los lugares marcados con una gran B o cuando a Conker se le enciende una bombilla sobre su cabeza.
Esto también hace que los entornos centrales del juego estén mas limitados a pocas acciones, ya que aquí mas allá de estirar el salto con un aleteo de cola al mas puro estilo Dixie (Tiny) Kong, poco mas puede hacerse con Conker. La limitada cantidad de movimientos se convierte en algo positivo y centra nuestra atención mas aun si cabe en el contexto sensitivo y además no se convierte en un lastre para la recolección de objetos. ¿Y sabéis porque? ¡Porque esa recolección de objetos anclada a los juegos de Rare desde hace años desaparece por completo en este juego! Aunque parezca increíble, en Bad Fur Day Rare se libera de sus propias ataduras y nos limita a coger única y exclusivamente vidas (que son algo puramente testimonial y que no sirven absolutamente para nada) y dinero. El dinero está en Conker y sirve para todo, eso sí, no será fácil del todo cogerlo porque está escondido…y porque se mueve. Por cierto, os recomiendo no dejaros ni un fajo, los que habéis llegado a cerca del final sabéis porque. Cash Prices!
Lo que se estarán a estas alturas los que no lo han jugado aún (Corred insensatos) es cómo funciona el desarrollo del juego. Pues bien, amparándose en un universo irracional, gore, sexual y excesivo a todos sus niveles, el verdadero motor del juego es la “solución de problemas” de los alocados personajes que encontramos a nuestro paso, ya sea en forma de minijuego, de contexto, de plataformas, de shooter, de jefe final o de la manera mas jodidamente inverosímil pero siempre con el objetivo de conseguir mas y mas dinero, que nos expanda un poco mas el mundo y nos haga acercarnos a nuestro objetivo de vencer a cierto Rey y recuperar a cierto personaje. El sistema es similar a las aventuras de Rare de toda la vida con un profundo lavado de cara a nivel visual, de items y de contexto.
Como veis, estoy siendo bastante enigmático con situaciones y personajes porque de verdad que merece la pena asistir a uno mismo al desfile de locuras de este juego. En serio, si hay algún cartucho que merece la pena jugar “Spoiler-free” como se dice ahora, ese es Conker.
Especial mención habría que dar a los personajes que pueblan el juego, de verdad que pocas veces habremos asistido a la posibilidad de conocer una fauna así, podría dar decenas de ejemplos. Yo recomendaría Post aparte a Fast y Leni solo para hablar de toda esa tropa que las mentes retorcidas de Rare han creado. Yo por mi parte me voy a quedar con uno, el personaje de la muerte. Genial.
Otro punto y aparte merece el sonido del juego, en forma de voces, melodías y efectos sonoros, que rallan la perfección (Siempre nos quedan espinas como el idioma o el no ser capaces de captar ciertos matices hechos única y exclusivamente para un público British). Absolutamente todos los personajes tienen algo que decir en Conker, ya no son personas mudas (Goldeneye), Balbuceos (Banjo), frases sueltas (Donkey) o personas con genial doblaje pero sin expresión (Perfect Dark). Ahora son, desde Conker hasta el secundario mas secundario del juego, personajes con voces geniales, llenas de matices, de calidad y con un doblaje original exquisito. Todo esto se une a la expresión facial de éstos y a la sincronización labial (Que va mas allá de abrir la boca cuando suena voz y muchas veces podemos “ver” lo que Conker está diciendo) y uno se queda estupefacto con el trabajo conseguido por Rare hace tantos años.
El desarrollo de la personalidad de los distintos personajes es muy importante en el juego y se sustenta básicamente en su voz. La personalidad de Conker es arrolladora y su voz es la que le da todo el empuje necesario, otros como Mighty Poo la usan como elemento catártico, tanto de sus penas como de nuestras mentes. No quiero extenderme mas en un apartado tan auto limitado pero la verdad es que me parece el detalle que marca esta obra maestra y que va de la mano con el humor que despliega, sumando un conjunto que inevitablemente sale victorioso.
Las melodías también recuperan un poco el encanto perdido y aunque se presentan de manera mas ambiental consiguen su propósito, que es dotar de el “puntito” necesario que necesita cada tramo del juego, ya sea épico, sensual, terrorífico o movido. Está claro que se ven beneficiadas porque muchas parten de una base ya hecha que les beneficia, que es ni mas ni menos que la partitura original de la película a la que están homenajeando.
Los efectos sonoros son, como siempre, marca de la casa, tanto por calidad como por cantidad y no tienen ese tono “enlatado” que tenían otros muchos juegos de la época (Supongo que por el sistema de grabado en el cartucho)
Finalizando con este modo historia, pasamos a hablar de la duración y la dificultad del juego, que van bastante de la mano. Se puede decir que Conker es un juego relativamente corto, sobre todo si lo comparamos con sus hermanos mayores de la compañía de Twycross. No alcanza la magnitud de Jet Force Gemini o Donkey Kong, pero tampoco lo pretende. Nos cuenta una historia con un desarrollo y un desenlace que bajo mi punto de vista tiene la duración justa para no antojarse corta y tampoco caer en la reiteración de elementos o bajar el listón de los mismos. Consta de 9 capítulos, de los cuales por ejemplo el primero se reduce a la presentación del juego y el aprendizaje con Birdy. Mientras que el de Windy se subdivide en tres muchos mas largos.
El juego puede parecer aun mas largo por la dificultad que atesora. Podríamos catalogar a Bad Fur Day de juego duro para los tiempos que corrían. Momentos con picos de dificultad bastante elevados hacen que los jugadores menos experimentados se estanquen con facilidad y que los mas duchos tengan que agarrar el mando con fuerza. Además al no contar con el factor “libertad” de otras aventuras, la sensación de parón es mas acentuado.
Mas allá del modo principal del juego nos encontramos con otros secundarios (¿O no?) que redondean este bicho hasta un pico difícil de alcanzar.
Por un lado tenemos el interesantísimo modo Chapter, que en Conker se hace mas indispensable y atractivo que nunca y que nos permite jugar, como supongo que ya os imaginaréis, a los 9 capítulos diferentes del juego de manera individual. Para cuando nos pique el gusanillo y queramos emularnos a nosotros mismos en las divertidas parodias de las que hace gala el juego.
Por otro lado tenemos el fantástico y variado modo multijugador, que no se queda a medio camino como en Tooie, Donkey Kong o Jet Force Gemini y que nos plantea diversidad y calidad a partes iguales. Utiliza tanto minijuegos extraídos del modo monojugador como elementos diferentes pero extraídos de los contextos en los que se mueve el juego. Contamos con casi una decena de pruebas diferentes entre las que se encuentran clásicos como un Deathmatch o una carrera de deslizadores, eso sí, con el toque de magia de Conker. Luego ya entramos en los que son mas especiales, por decirlo de alguna manera. Y aunque encontremos reminiscencias con los mas antiguos modos multijugador inventados por el hombre, se hacen muy divertidos.
Tenemos modos como Heist en donde en forma de comadrejas debemos robar dinero. Tank, en el que debemos reventar a tanques enemigos mediante detonaciones o incluso Raptor, donde cavernícolas y dinosaurios se baten en un duelo por la supervivencia de su especie (tú eliges de qué lado estas).
Pero sin duda mi favorito es Beach (Little Spoiler Alert) en el que dos bandos se enfrentan en mitad de cierta guerra. Mientras que los buenos deben cruzar un perímetro hasta alcanzar la salvación en forma de traslado de refugiados, los malos deben intentar abatirles desde posiciones estratégicas ventajosas. Una verdadera delicia desmembrar ardillas con el rifle de francotirador, de verdad.
En definitiva un modo multijugador que no se limita a ser una comparsa desafinada sino que cuenta con argumentos mas que suficientes para darnos horas y horas de deleite psicodélico y visual.
¿Y llegados a este punto que mas puedo deciros de Conker’s Bad Fur Day? Pues os aseguro que muchísimo mas de lo que os he contado hasta ahora. Como os dije antes, podría haber profundizado mas en su historia, sus personajes, sus hilarantes situaciones, pero os prometo que es una gozada disfrutarlas por uno mismo.
Como conclusión, creo que Conker supuso la culminación a la maestría de Rare en todos los terrenos con su inseparable Nintendo 64, tanto en la parte tecnológica como de diseño, bebiendo y mejorando a sus hermanos mayores y redondeando un juego irrepetible (Curioso adjetivo, teniendo en cuenta su gemelo hipervitaminado de Xbox). Creo que alcanza el sobresaliente sin discusión en todos y cada uno de sus apartados, mostrándose sin fisuras y con un acabado inalcanzable. Además supuso la ruptura de las cadenas de Rare como niña mimada de Nintendo, creando un juego antítesis de la cultura Nintendera de la época, lo que a la postre, por desgracia, comenzaría a degradar las relaciones de la dupla que nos hizo soñar.
Es un juego que se desprende de cualquier etiqueta para a su vez adquirirlas todas y unirlas sumando mucho mas que cada una de ellas por separado. No hay precedentes ni procedentes que hayan intentado emular esta amalgama de sensaciones ni que se hayan acercado y esto dice mucho del tipo de juego que es Conker.
Creo que es indispensable jugar a este juego para entender que hizo Rare, que legado nos dejó y como fue el juego que supuso el cénit de su creatividad.
Solo el tiempo nos dirá si será recordado como se merece, pero bajo mi humilde opinión es uno de los mejores y mas incatalogables juegos de la historia y eso se dice muy a la ligera… pero es mucho decir.
DESPEDIDA
Pues bien, hasta aquí ha llegado este Especial que me ha costado mucho mas de lo que me esperaba. Si he tardado tanto tiempo ha sido porque no quería defraudaros con algo peor de lo que vosotros o yo mismo podrían esperar.
He necesitado de muchas horas para encontrar las palabras con las que contaros las sensaciones que he vivido con estos videojuegos, que muchas veces son difíciles de explicar, sobre todo cuando hablas de historia viva del mundo que tanto nos gusta e historia viva de nuestra propia vida.
Cartuchos que me han marcado y con los cuales me ha costado un mundo despegarme y verlos desde una perspectiva mas objetiva.
Fruto de eso han sido algunos párrafos caóticos y algunas frases de mas de 40 palabras entre punto y punto, puro resultado de un “Brainstorming desatado de recuerdos, vivencias y nostalgia pura que gracias a Fast y Leni he podido contaros en esta pequeña gran página.
Muchas gracias a los que habéis llegado hasta aquí y a los que habéis disfrutado leyendo estas líneas o rememorando estos juegos. Y ojalá que haya muchos que se animen a jugarlos si no lo habían hecho antes. Espero que os haya gustado.
Un saludo, nos vemos pronto por 99redpotions.
Rare ha muerto, larga vida a Rare.
Diego dC.Santos