Ratones coloraos

Por Malagatoro

Morenito de Aranda al natural con el encastado segundo: Foto: Juan Pelegrín (Las Ventas)

Feria de San Isidro (aunque no lo parezca). Plaza de Toros de Las Ventas (aunque tampoco). 26 de mayo de 2011.

El nivel de presentación del ganado en Madrid está bajo mínimos. Al ruedo de Las Ventas han saltado cuatro ratones coloraos, amén de un felino negro, indignos de una plaza que antaño fue la primera del mundo y que hoy está a la altura de una plaza de pueblo. Siguen poniéndoselo a huevo a la empresa de Málaga. Cuando echen en la feria de agosto el pseudotoro acostumbrado, dirán eso de que es un “toro para Madrid”, y esta vez habrá que callarse porque llevarán razón. Hoy no había ninguna figura en el ruedo, ningún miembro del G10, ni estaba Curro Vázquez, ni Matilla, por lo que no cabe más que buscar entre los responsables a la empresa que los compró, y a los veterinarios y al presidente, el ínclito Julio Martínez, que los aprobaron. Y para no ser menos ya empieza a llegar aroma de aftershave de algunos pitones.

La corrida ha manseado en varas y, salvo el segundo, descastados, sin transmisión, noblones y blandos en diverso grado. El habitual viento en esta plaza resultó muy molesto para la lidia.

A Urdiales le ha correspondido el peor lote. Su primero era un inválido que no podía con su alma. No tenía un pase. Con el cuarto ratón pobre de cara, desrazado y sin transmisión, anduvo aseado y haciendo el esfuerzo. Es posible que si le hubiera dejado la muleta puesta hubiera sacado algo más como se atisbó en una tanda en redondo. Pero realmente había poco donde sacar y el toro no gustaba, y ya se sabe que en Madrid torear a la contra es un imposible. No tiene suerte este torero de buen corte que torea pocas corridas y de las que no quieren ni oler las figuras. Finalizó su actuación con una buena estocada entrando por derecho.

A Morenito de Aranda le tocó en suerte un toro terciado que fue protestado, pero que a la postre fue el mejor del encierro. Animal encastado que al principio embestía con genio pero que en el transcurso de la faena de muleta vino a más. Con la diestra anduvo al hilo sin acabar de acoplarse. Por el pitón izquierdo iba mucho mejor el toro, embistiendo con movilidad y hasta el final. Morenito está mejor al natural, especialmente en la segunda serie en la que baja la mano, carga la suerte, y logra algunos muletazos largos y con gusto. Sin embargo la faena no tuvo la rotundidad necesaria. Mató de una estocada contraria, cuya travesía impidió que el toro doblase, necesitando del empleo del verdugillo.  El quinto se dejaba, era noble, pero se quedaba corto en la embestida y no transmitía. Estuvo con ganas, colocado en el sitio, pero poco más.

Miguel Tendero me ha decepcionado, esperaba más de él, aunque es cierto que su primero tenía una embestida descompuesta y de poco recorrido, no acabó de acoplarse, porfiando en demasía inútilmente cuando el toro no pasaba ya. Mal con la espada. El sexto era el más cuajado pero muy pobre de cara, y al igual que sus hermanos manseó en varas. Burel blandito y soso al que le faltaba recorrido. Tendero anduvo por allí y también se puso muy pesado en la moderna suerte del trapazo y bostezo. De nuevo mal con la espada.

¡Madrid, quién te ha visto y quién te ve!

Paz y salud