Razones que provocan la disminución del deseo sexual en una pareja

Publicado el 08 septiembre 2017 por Carlosgu82

¿Uno quiere más? ¿Otro quiere menos? ¿No hay ganas? Estos interrogantes suelen ser muy frecuentes en el mundo de las parejas. Aunque para muchos suele ser un tema tabú del cual no se habla, es una situación que se puede producir en cualquier momento de la vida y bajo distintas circunstancias.

En general, las causas que lo producen se pueden dividir entre factores orgánicos o emocionales. A nivel orgánico puede haber un desbalance hormonal como tiroides o diabetes, incluso la presión alta o la presión baja pueden influir.

A nivel emocional puede ser mala vinculación de la pareja, celos, inseguridades o alguna cuestión de ella o de él que no termina de convencer a ninguno de los dos, es decir, el deseo sexual está muy ligado a lo que pasa en la realidad de la pareja.

Mariana Kersz, psicología y sexóloga, explicó en diálogo con Infobae que cada pareja tiene una frecuencia que le es habitual, la cual puede ser una vez por semana o mensualmente, todo depende de cada vínculo. “Si el encuentro sexual es cada 4 meses, podemos pensar si está bien o mal, ajustar o desajustar eso, pero si para ellos está bien no hay ningún problema. El tema es qué sucede cuando pasan más de 4 meses y el deseo desaparece”.

“El sexo es una de las cuestiones que dividen y diferencian a una pareja de cualquier otro vínculo, entonces no es lo mismo ser amigos que ser pareja. Tienen relaciones sexuales y eso es lo que la distingue de las demás uniones”, afirmó.

Pero para cada problema siempre hay una solución posible, y ésta no es la excepción. En general, cuando hay falta de deseo se empieza trabajando en las sensaciones y en la sensibilidad de cada uno de los integrantes de la pareja y se comienza reconociendo el cuerpo del otro. Son ejercicios lentos y progresivos que tienen como finalidad unir a esa pareja y llevarlos a un caso satisfactorio.

Siempre hay que tener en cuenta que la comunicación es fundamental, se trabaja en por qué hay mucho deseo de un lado y poco del otro. También hay que ver cómo se encuentra la autoestima de cada uno en ese momento y la historia familiar, entre otras cosas.

Lo importante es detectar qué pasa porque muchas veces sucede para que no sea un problema que se extienda a los demás ámbitos de la vida . “A veces no hay una baja sexual, sino una diferencia en lo que cada uno quiere. Uno puede querer todos los días y el otro no. Entonces aquel que quiere más y no recibe eso se siente rechazado y termina enojado e indignado por la situación y eso pega de lleno en su autoestima y por supuesto afecta lo cotidiano”, detalló la especialista.