Y se habla de fenómeno, en la industria del entretenimiento, porque ninguna banda ha logrado lo que estos seis jóvenes alcanzaron: vender más de 20 millones de discos, cantar en 116 ciudades y lanzar 18 discos.
Anahí, Dulce María, Maite, Alfonso, Christopher y Christian formaron parte de ese boom que traspasó las fronteras de México y llegó a donde ninguna agrupación latina había podido. Quizás, no imaginaron que una telenovela iba a marcar sus vidas para siempre.
Todo surgió con “ Rebelde”, estrenada en octubre de 2004. La producción de Pedro Damián era una adaptación de Rebelde Way, un seriado argentino que rompió récords en el país suramericano.
“El dramático juvenil venía con ese estilo de lanzar grupos musicales. En México ya había pasado con Alcanzar una estrella, Dkda y Clase 406, pero ninguno tuvo la misma suerte. RBD fue como un experimento. Unir a los actores juveniles del momento y soltarlos en un escenario era sin duda, un riesgo. O triunfaban o hacían el ridículo.
Afortunadamente, para Televisa, pegaron demasiado rápido. En poco tiempo había un disco en la calle, barajitas, revistas, ropa, accesorios y souvenirs, todo agotado”, destacó el locutor y productor zuliano Andrés González.
Fue tanto el éxito de Rebelde que en la tercera temporada alargaron el tiempo de duración de los capítulos a una hora con treinta minutos, siendo la primera novela con tanta duración. En total, fueron 20 meses de transmisión.
Los sociólogos vieron la influencia de esta telenovela y del grupo musical con mayor impacto entre los jóvenes, por encima de otros proyectos como Menudo o Timbiriche. No en vano se convirtieron en un suceso en España, Brasil, Perú, Colombia, Ecuador, Chile , Eslovenia, Rusia, Rumanía y Venezuela, donde cantaron varias veces.
“La desintegración del sexto es parte de la vida y las cosas de pronto se dan de una forma en la que uno no sabe manejar, por ejemplo la fortuna o el amor quizás llegan cuando uno no está preparado. En esta carrera hay que reinventarse y tratar de ofrecerle al público un producto de calidad. Aquí hay altos y bajos y de pronto no todo va a ser como RBD, imagínate, ese fenómeno fue algo demasiado grande”, dijo Christian Chávez a PANORAMA.
En cuatro años, la banda convirtió a sus integrantes en estrellas; obviamente no escaparon de polémicas, críticas y rumores. Los chicos salieron por completo del anonimato, aunque algunos ya tenían una carrera sólida, como es el caso de Anahí. Las cifras de sus cuentas, obviamente se elevó. Fue mucho trabajo, muchos conciertos, mucha mercadotecnia.
“Veo a RBD como el producto de un gran equipo de trabajo. Me tocó compartir de cerca con ellos y noté que había bastante armonía, la mezcla perfecta de managers, productores, técnicos”, opinó la zuliana Andreína Castillo, fanática de la agrupación.
Y aunque mucho se ha hablado sobre un posible reencuentro, y lanzamiento de disco, este año, Maite lo duda. Por lo menos fue lo que manifestó a PANORAMA: “Imagino que en algún momento se puede dar esa situación. La verdad es que no la veo cercana porque ahorita todos están haciendo sus cosas por separado”.