Recaudar más como única opción, sí ese podría ser otro de los lemas de Hacienda que, para cubrir presupuestos y evitar posibles sanciones de Bruselas solo ve un camino: aumentar la recaudación. Mi pregunta (y la de muchos) es por qué no hacen como hacemos los contribuyentes de bien cuando nuestros ingresos descienden: reducir los gastos. Y no hablo precisamente de recortes en sanidad o educación, sino de eliminar los enormes gastos innecesarios que ellos mismos generan en autonomías, duplicidades, asesores innecesarios, empresas públicas más que dudosas, etcétera. No, siempre es mejor recaudar más a costa de los contribuyentes que ya estamos asfixiados.
Recaudar más como única opción
Recaudar más… ¿no hay otra opción?
Ha llegado un momento en el que ya no somos conscientes de los impuestos que pagamos. Es todo tan variado, cambiante y complejo que es imposible. ¿Cómo saber lo que hemos pagado de impuestos (entre IVA y especiales) de la gasolina que le hemos puesto al coche, o el IVA de los alimentos, o las tasas de todo tipo, directas o indirectas, o las sanciones y las multas que, aunque nos las llamen impuestos sí lo son porque incluso las incluyen en los presupuestos. Sancionar es una manera más de recaudar «sin subir impuestos».
Se suele criticar a la izquierda de que siempre está pensando en cómo distribuir la riqueza pero es del todo incapaz de generarla, y es cierto, estoy totalmente de acuerdo con la afirmación, pero ¿qué hace la derecha para ser mejor que la izquierda? ¿Subir impuestos cuando dice que va a bajarlos? ¿Asfixiarnos con estructuras políticas insoportables?
244 páginas
Tapa Dura
Sin portes
Solo 12 euros
En apenas cinco años hemos sufrido un incremento fiscal de más de trece mil millones de euros (en realidad yo creo que es mucho más), y eso que el propio Montoro (como apunta a menudo uno de los comentaristas de este Blog) ha sido siempre un defensor de las teorías de Laffer, esas que dicen que una rebaja de impuestos puede conseguir elevar la recaudación. ¿Por qué defendía eso en la oposición y luego hizo todo lo contrario y lo ha estado haciendo durante años?
Y luego está la contabilidad creativa, como cuando aumenta los pagos a cuenta del impuesto de sociedades y lo computa como un ingreso para cubrir el déficit. Eso es una barbaridad contable porque ese dinero dejará de recaudarlo al año siguiente. A no ser, claro está, que piense mantener el anticipo para siempre y de ese modo descapitalizar sistemáticamente a las empresas. Supongo que por eso ha limitado también la posibilidad de aplazar impuestos, porque quiere cash, más cash.
Y pese a todo, año tras año, se quedan cortos en recaudación según lo presupuestado. ¿Solución? Más subidas; a poder ser encubiertas para que no las detectemos; un pellizco por aquí, un recargo por allá, una multa de tráfico por ir a cinco kilómetros más de lo «permitido»…
Ramón Cerdá