Hace unos años esta carne estaba poco valorada, pero ya ves, últimamente es una de las mas demandadas por su sabor y su precio, a mi personalmente es la parte del pollo que mas me gusta.
Esta elaboración también la puedes hacer con cualquier parte del pollo, pero recuerda que la carne esté cortada en trozos pequeños.
Espero que pruebes esta receta tan estupenda y me comentes si te gusto.
Sin mas que decirte espero que disfrutes de esta delicia y tengas servilletas a mano, ya que las vas a necesitar.
- 1 Kilo de alitas de pollo
- 6 Dientes de ajo
- 150 ml de vino blanco
- 3 Cucharadas soperas de aceite de oliva
- Sal al gusto
Elaboración
Limpia las alitas de pollo, quítale las plumas y la punta, si no te gusta .
Echa sal al gusto a las alitas.
A los dientes de ajo le haces un corte en el medio sin acabar de partirlos.
Pon una sartén a fuego medio y echa las 3 cucharadas de aceite de oliva.
Cuando este caliente pones las alitas.
Las fríes 3 minutos por cada lado hasta que estén doradas a tu gusto.
Ahora añade los ajos y lo remueves bien.
Lo sofríes unos 2 minutos mas.
Vierte el vino blanco y que reduzca 4 minutos.
Una vez reducido el vino ya las tienes preparadas.
Sírvelas bien calientes y a disfrutar.
Consejero
- El vino blanco que sea suave tipo fino, si lo tienes un poco mas fuerte deja reducir mas tiempo.
- Los ajos sin pelar, lo puedes poner pelados pero con cuidado no se quemen que amargan.