El semifreddo, o semifrío, es un postre con variadas interpretaciones. En esencia es una mousse cremosa congelada, una versión más ligera y aireada del helado. Se diferencia de éste en que se suele servir cortado en lonchas y no se necesita una heladera para prepararlo. En ocasiones se sirve a capas, con bizcocho o cookies, en ocasiones con frutos secos o fruta fresca de temporada. Es elegante y a la vez accesible. Es el postre que querrás servir en las tardes de verano cuando tengas invitados, o simplemente cuando te apetezca un capricho fresco y apetitoso.
Bueno… en realidad no es tanto cuestión de pereza como de tomar un ingenioso atajo. Porque a pesar de que no hace falta preparar unas natillas y enfriarlas, y sacar la artillería pesada, sí que tendremos que montar (las claras), fundir (el chocolate) e integrar (la mezcla).
La receta de hoy tiene como base un merengue que se prepara montando las claras tibias a punto de nieve con un poquito de miel o sirope de arce hasta que se vuelven brillantes y forman picos consistentes. Una vez que tenemos el merengue, lo integraremos bien a la base que habremos preparado con el yogur griego y el plátano. En este caso he elegido utilizar yogur griego casero de leche cruda, muy espeso, y plátano para aportar el dulzor y mayor cremosidad a la mezcla. Para una versión sin lácteos, no dudes en sustituir el yogur por la misma cantidad de nata de coco montada.
- 15gr de chocolate negro (mínimo 85%)
- 1 cucharada de aceite de coco
- 4 claras de huevo
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- ¼ de cucharadita de cremor tártaro
- 1 pizca de sal
- 1 cucharada de sirope de arce o miel cruda
- 500gr de yogur griego o de leche entera colado (me gusta utilizar yogur casero de leche cruda)
- 1 plátano maduro
- 150gr de fresas frescas, cortadas
- 30gr de almendras, picadas
- Chocolate y aceite de coco para servir (opcional)
- Funde el chocolate y el aceite de coco al baño maría. Forra una bandeja con papel de horno y extiende la mezcla para formar una fina capa. Si quieres, puedes utilizar un pincel. Mete la bandeja en la nevera para que se solidifique mientras preparas el semifreddo.
- Forra un molde de pan (22 cm x 12 cm aprox.) con papel de horno, dejando lo suficiente en los bordes largos para taparlo una vez relleno.
- En un bol mezcla las claras, el sirope de arce o miel, la vainilla, el cremor y la pizca de sal. Ponlo al baño maría y remueve con una cuchara hasta que la mezcla esté tibia. Tardará unos 2 minutos.
- Retira el bol del fuego y bate bien con unas varillas, en velocidad media-alta, hasta que se formen picos brillantes y consistentes, unos 5 minutos. El merengue tiene que quedar firme y muy brillante, y mantener la forma.
- Si tienes thermomix, las claras se montan con la mariposa, a 37º, velocidad 3½.
- Por otro lado, bate bien el yogur con el plátano hasta que la consistencia sea lisa y untuosa.
- Mezcla unas pocas cucharadas del merengue al yogur para aligerar la base, luego incorpora con cuidado el resto del merengue hasta que se haya integrado del todo.
- Echa aproximadamente la mitad de la mezcla al molde, cubre con una capa de láminas de chocolate que preparaste en el primer paso, y añade el resto de la mezcla de yogur.
- Alisa la superficie con una espátula, cubre con el papel y congela durante al menos 4 horas o durante la noche.
- Cuando lo vayas a servir, mete el molde en agua caliente durante unos segundos. Vuelca el semifreddo en una fuente, decora con las fresas y las almendras (y si quieres, salsa de chocolate preparada de la misma forma que en el paso 1) y corta en porciones.