Este fin de semana he aprendido una de las cosas más valiosas de toda mi vida.
Mira que me gustan los bombones Ferrero Rocher, y a ti?
Pues imagínate una tarta entera, no sólo con su sabor, sino también con una textura similar: crujiente y ligera... (traga, traga, que se te está haciendo la boca agua, como a mí...).
Pues me han enseñado a hacerla! Y más sencilla y rápida no puede ser. Gracias a mi cuñada voy a compartir la receta con la que quedaréis como reinas.
Éxito asegurado!
Ingredientes
-10 obleas grandes
-Un bote de Nutella
-lacasitos, fideos de colores... o lo que se os ocurra para decorar
Cómo se hace
-Se calienta la Nutella en el microondas para que quede un poco líquida de manera que se extienda con facilidad (no os paséis, que se quema).
-Sobre una superficie plana se coloca una oblea (un plato normal, no, porque no cabe y la oblea se rompe a la mínima), y se extiende una capa de Nutella.
-Sobre ella se coloca otra oblea, y se extiende otra capa de Nutella, y así hasta 10 obleas.
-Sobre la última se extiende una capa, esta vez más gruesa, y se decora al gusto con lo que se os ocurra.
-Servir fría. La podéis meter 30 minutos al frigorífico, y triunfaréis seguro!
Así quedó la nuestra:
Ah! Y la pusimos junto con otra de tiramisú, cuya receta en 8 pasos os contaba en este post, en el centro de una mesa dulce, cuyo color predominante fue el favorito de la cumpleañera.
¿Adivinas cuál?