Recetas para comer insectos

Publicado el 16 mayo 2013 por Nmactualidad

Tras el informe de la FAO y su recomendación para incluir en la dieta a los insectos, os traemos ricas recetas para preparar platos muy exóticos


MUNDO.- Nuestros amigos de Noticias del Mundo nos sorprendieron esta semana reportándonos el último informe publicado por la FAO en la que recomienda incluir insectos en la dieta diaria. Según el informe, si todos comiésemos insectos mejoraría nuestra salud, siendo también muy beneficioso para el medio ambiente. Desde NM Actualidad hemos tomado esta recomendación como una más de las que se suelen publicar en otros medios, y para todos aquellos que se animen, les traemos una serie de recetas de ricos insectos con los que “chuparse los dedos”. Tempura de escorpión
En Pekín se deleitan a su paso con este tentempié crocante y de sabor ahumado. Los chefs experimentados en entomofagia recomiendan dejar reposar el escorpión en alcohol antes de cocinarlo, para así neutralizar su veneno. También aconsejan – detalle no menor- saltearse el aguijón y el primer anillo del bicho y así evitar riesgos de ingerir restos de la mortal toxina. Sólo para valientes.  Larva Witchetty  Se comen crudas o ligeramente tostadas en ceniza caliente, la larva witchetty es un elemento básico de la alimentación aborigen australiana, donde es buscado como una rica fuente de proteínas. Tiene un sabor similar a las almendras y crema, cuando la piel de la larva es cocida como las salchichas o como el pollo asado.  Hormigas culonas a las brasas  El color oscuro, el abdomen abultado y las tenazas pueden parecer aterradores a primera vista, pero en Colombia, las hormigas culonas son un manjar típico con propiedades afrodisíacas. Para prepararlas se descartan las cabezas, alas y patas, se sumergen los cuerpos en agua salada y se los tuesta en sartenes de cerámica. Una explosión de sabor en la boca.  Tacos de gusanos de maguey  Las larvas de mariposa que crecen en las plantas del maguey, en México, son protagonistas de este plato de fama mundial. Se preparan fritos hasta dorarse y se acompañan con guacamole. Sus fans destacan el sabor aterciopelado de esta combinación de texturas.  Saltamontes fritos  Aparentemente la mayoría de las delicias chinas, así como en otros países del sudeste asiático, parecen consistir en cualquier cosa que se mueva. Ahora tenemos los saltamontes fritos, que son bocadillos salados y picantes, comunes de encontrar en los mercados de Tianjin.  Larvas burbujeantes  La zaza-mushi (o larva acuática) es uno de los platos a base de insectos más codiciados en Japón. Se consumen hervidas y salteadas en salsa de soja y azúcar. Tan ardua es su recolección que en las cartas de los mejores restaurantes cotiza a tanto como el caviar. Un recolector profesional alcanza a reunir cerca de cinco libras de zaza-mushi por día, en invierno. Y cada libra se vende a 40 dólares.  Fideos con grillos crocantes  Es una creación del chef amateur David George Gordon, que revolucionó el festival de Richmond, Estados Unidos. Consiste en un plato de fideos regado de crocantes grillos salteados, que aportan las proteínas de las que carece la harina. Ideal para los amantes de la comida sana que quieren romper con la tiranía de la bolognesa.  Estofado de pupas del gusano de seda  El estofado de pupas del gusano de seda, también conocido como Beondegi, son un aperitivo muy popular en la cocina de Corea del Sur. Servido por muchos vendedores ambulante, las pupas son también aperitivos en los bares populares, e incluso vienen en latas.  Tarántula asada  Los indígenas de la amazonia venezolana son los precursores en la ingesta de esta especie de arácnido, conocido como theraphosa blondi. Nada más ni nada menos que la tarántula más grande del mundo, llega a medir hasta 30 centímetros y pesar alrededor de 100 gramos. Se asa y, después de siete minutos, se pela. Una vez que se le quitan las patas y los pelos, se paladea la carne blanca del abdomen, de sabor similar al del camarón. Las tribus yanomami le atribuyen bondades afrodisíacas.  Pastelera de huevos de mosca  Este postre es una variante particular de la tradicional crema pastelera. El diferencial está en las larvas drosophila, los huevos que ponen las moscas que se alimentan de las frutas en proceso de fermentación, que se trituran y agregan a la preparación. Su sabor azucarado añade un ligero toque de acidez a la crema, muy apreciado por los paladares sofisticados.  Galletas de avispas  Estas cookies, ideales para acompañar el café, causan furor en Japón desde su lanzamiento, en 2007. Se trata de las clásicas galletas de arroz, aunque con un toque gourmet: unas 5 y 6 avispas por unidad. Se las caza en estado salvaje, se las hierve y seca, para luego añadirlas a las cookies y realzar su dulce sabor.